El operador de gasoductos Nord Stream 2 AG, con sede en Suiza, afirmó que no ha solicitado la declaración de insolvencia.
“No confirmamos las informaciones de los medios de comunicación de que Nord Stream 2 se ha declarado en quiebra”, señaló la compañía.
“La empresa ha informado a las autoridades locales que ha tenido que rescindir los contratos con los empleados tras la imposición de sanciones estadounidenses a la empresa”, agregó Nord Stream 2 AG en comentarios enviados por correo electrónico.
La empresa estaba estudiando la posibilidad de declararse en concurso de acreedores, dijeron a Reuters a principios de esta semana dos fuentes conocedoras de la situación, mientras intenta resolver las reclamaciones antes de que se cumpla el plazo de las sanciones estadounidenses para que las entidades dejen de tratar con ella.
Por su parte, la directora de economía del cantón de Zug, Silvia Thalmann, dijo que ese proceso no se había activado. “Sabemos que Nord Stream 2 se enfrenta a enormes dificultades de pago. La empresa no ha presentado hasta ahora la declaración de quiebra”.
El gasoducto Nord Stream 2, de 1,230 kilómetros de longitud y que va de Rusia a Alemania, no empezó a funcionar comercialmente porque estaba a la espera de la certificación alemana. El proceso de aprobación quedó en suspenso la semana pasada como consecuencia de la escalada de la crisis ucraniana.
Desde la invasión rusa de Ucrania la semana pasada, varias grandes empresas han dicho que abandonarán sus operaciones en Rusia, incluida Shell, que informó que ya no participará en Nord Stream 2, entre otras inversiones.
Rusia califica sus actividades en Ucrania de “operación especial”.