Han pasado casi dos años desde que la Organización Mundial de la Salud (OMS) anunciara la existencia del SARS-CoV-2, el virus que causa la COVID-19 y que provocó una pandemia global. Desde entonces se han puesto en marcha diversos estudios para acabar con esta terrible enfermedad que ya se ha llevado millones de vidas consigo.
De hecho, con la llegada de las vacunas se ha logrado un progreso significativo en el intento de encontrar medicamentos efectivos para el tratamiento de esta enfermedad. Sin embargo, según la BBC, laboratorios en distintas partes del mundo continúan investigaban a mediados del 2020 más de 150 fármacos diferentes en su intento de reducir la expansión del coronavirus y sus variantes.
Ahora, farmacéuticas como Pfizer, Merck, Sharp & Dohme y Ridgeback vienen desarrollando píldoras para combatir el COVID-19. El laboratorio suizo Roche y el surcoreano Celltrion también hacen lo propio.
Paxlovid
El laboratorio Pfizer anunció el pasado 5 de noviembre que un ensayo clínico sobre su píldora anticovid mostró una alta efectividad. El medicamento, llamado Paxlovid, que comenzó a desarrollarse en marzo de 2020, logró bajar en 89% el riesgo de hospitalización y muerte entre los pacientes adultos con COVID-19 con alto riesgo de desarrollar formas graves de la enfermedad.
Según narra la agencia AFP, los resultados de este ensayo clínico intermedio son tan buenos que el laboratorio estadounidense dijo que dejará de hacer pruebas y enviará los datos a la Agencia de Alimentos y Medicamentos (FDA) lo antes posible, como parte de su “presentación continua” para obtener la autorización de uso de emergencia.
El director ejecutivo de Pfizer, Albert Bourla, dijo luego a CNN que espera que el pedido de autorización pueda tener lugar “antes de Acción de Gracias”, es decir antes del 25 de noviembre.
“La noticia de hoy es un auténtico cambio en los esfuerzos globales para detener la devastación de esta pandemia”, dijo Bourla.
El principal análisis del ensayo evaluó los datos de 1.219 adultos en América, Europa, África y Asia. En los días inmediatamente posteriores a la aparición de los síntomas, algunos de ellos recibieron el fármaco experimental y otros un placebo, durante cinco días, cada 12 horas.
Molnupiravir
Desarrollada originalmente para tratar la gripe, la píldora Molnupiravir fue aprobada para el tratamiento contra el COVID-19 por la Agencia Reguladora de Medicamentos de Reino Unido (MHRA, por sus siglas en inglés).
Según detalla la BBC, la pastilla podrá administrarse dos veces al día a pacientes que han dado positivo en un test y que presentan al menos un factor de riesgo para desarrollar la enfermedad grave.
Diseñado por las farmacéuticas estadounidenses Merck, Sharp y Dohme y Ridgeback Biotherapeutics, Molnupiravir se convirtió en una de las píldoras en ser aprobada por especialistas para su uso en el tratamiento anticovid. Sin embargo, deberá contar con el visto bueno de la OMS.
“Este es un día histórico para nuestro país, ya que el Reino Unido es ahora el primer país del mundo en aprobar un antiviral contra el covid-19 que se puede tomar en casa”, dijo Sajid Javid, ministro de Salud, en un comunicado el pasado 4 de noviembre.
“Cambiará la situación de los más vulnerables y de los inmunodeprimidos, que podrán recibir pronto el revolucionario tratamiento”, añadió.
AFP indica que el Molnupiravir se desarrolló inicialmente como un inhibidor de la influenza y el virus sincitial respiratorio (otras dos importantes infecciones respiratorias agudas) por un equipo de la Universidad Emory en Atlanta, Georgia.
Ronapreve y Regkirona
La Agencia Europea de Medicamentos (EMA) anunció esta semana que aprobó por primera vez la comercialización en el mercado de la Unión Europea (UE) de dos tratamientos con anticuerpos contra el coronavirus.
El órgano regulador indicó que había aprobado el uso de un tratamiento del laboratorio farmacéutico suizo Roche, el Ronapreve, y de un tratamiento del laboratorio surcoreano Celltrion, llamado Regkirona.
“Ronapreve y Regkirona son los primeros medicamentos a base de anticuerpos monoclonales que reciben una valoración positiva (...) contra el COVID-19″, dijo la EMA, con sede en Ámsterdam.
La comisaria europea de Salud, Stella Kyriakides, declaró que la aprobación de los dos medicamentos era una “etapa importante” contra la enfermedad ya que la UE se apoya hasta ahora en cuatro vacunas.
“En un momento en que suben los contagios en casi todos los Estados miembros, reconforta ver nuevos tratamientos prometedores en desarrollo dentro de nuestra estrategia farmacéutica contra el COVID-19″, declaró.
Otros potenciales antivirales orales contra la COVID-19 están en camino. La compañía Atea Pharmaceuticals, en colaboración con Roche, está evaluando al candidato AT-527 en un ensayo clínico global multicéntrico de fase 3, denominado MORNINGSKY, para el tratamiento de pacientes con covid-19 leve o moderado en un entorno ambulatorio.
Según el medio The Conversation, el AT-527 está diseñado como antivírico de acción directa administrado por vía oral para detener la progresión de la covid-19 al inhibir la replicación del virus SARS-CoV-2.
Píldoras no sustituyen la vacunación
Esta semana, DW conversó con el virólogo Felix Drexler, de la Clínica Universitaria Charité de Berlín, quien señaló que es muy probable que las píldoras solo sean eficaces en las primeras etapas de la infección. “La terapia por vía oral está prevista cada doce horas durante cinco días”, remarcó.
“Además de la duración de la terapia, ambas (Molnupiravir y Paxlovid) tienen un costo similar y funcionan, sobre todo, cuando se suministran temprano. Porque cuando el COVID-19 avanza y se transforma en una enfermedad grave, el virus deja de replicarse”, continuó señalando Drexler.
“Todo tratamiento antiviral, sea con anticuerpos o sea una píldora, funciona de esa manera. En general, estas son noticias muy positivas, pero eso no quiere decir que se debe dejar de vacunar. Hay que advertir que estas nuevas píldoras no sustituyen a la vacunación”, sentenció.