La Unión Europea quiere dotarse de un nuevo enfoque sobre la salud mental que otorgue especial importancia a la soledad, condición que puede afectar negativamente “al bienestar de la población, la inclusión social y la cohesión”.
“La presidencia sueca pretende subrayar el asunto de cómo prevenir y combatir la soledad”, dijo al enumerar sus prioridades políticas del semestre ante la comisión de Salud Pública del Parlamento Europeo el ministro sueco de Salud, Jakob Forssmed, cuyo país ejerce este semestre la presidencia del Consejo de la UE.
El titular del país escandinavo agregó que “la soledad que puede tener un impacto en la salud pública, en la salud mental, en el bienestar de la población y en la inclusión social y la cohesión”.
“La salud metal es un tema de gran relevancia pública. La pandemia de COVID y la guerra en Ucrania han traído esto a la primera línea”, agregó Forssmed, quien señaló que la presidencia sueca del Consejo trabajará con la Comisión Europea en este aspecto.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, avanzó el pasado septiembre en su discurso sobre el Estado de la Unión que el Ejecutivo comunitario prepararía una “iniciativa sobre salud mental”.
“Tenemos que cuidarnos mejor unos a otros. Y para los muchos que se sienten ansiosos, perdidos, un apoyo apropiado, asequible y accesible puede hacer toda la diferencia”, dijo la alemana.
Su Ejecutivo tiene previsto presentar en junio una comunicación a los Veintisiete con “un enfoque integral de la salud mental”, un área sanitaria que afecta a 84 millones de personas en la UE y cuyo impacto estimado en problemas asociados ronda el 4 % del PIB, según un estudio del 2018 de la Comisión Europea.
El ministro sueco señaló que durante los próximos seis meses tiene el objetivo de “intercambiar experiencias con otros países (de la UE) sobre cómo enfocaban este asunto antes de la pandemia o qué medidas se han tomado para contrarrestar la soledad”.
(Con información de EFE)