Los ministros de Interior y Seguridad del G7 acordaron hoy coordinar medidas para combatir la explotación sexual y el abuso de menores a través de internet, y para prevenir otros tipos de cibercrímenes y los riesgos derivados de la inteligencia artificial (IA) generativa.
Los titulares del ramo de los países del G7 (Alemania, Canadá, Italia, Francia, Japón, Estados Unidos y el Reino Unido) se comprometieron a estrechar la colaboración en estos y otros ámbitos durante una reunión de tres días que concluyó este domingo en la ciudad de Mito, en la prefectura de Ibaraki (norte de Tokio).
En el comunicado adoptado al término de la reunión, los ministros destacan la importancia de mantener la seguridad en el ciberespacio, y subrayan la necesidad de “actualizar la gobernanza de la economía digital de acuerdo con los valores democráticos compartidos”.
LEA TAMBIÉN: Proponen elevar a 10 años pena para delito de plagio con inteligencia artificial
El documento señala principios concretos como la transparencia, la seguridad y la protección contra el acoso en línea, el odio y el abuso, así como el respeto por la privacidad, los derechos humanos y las libertades fundamentales.
Los ministros alertan sobre “peligros crecientes” en el ciberespacio debido a contenidos de abuso sexual infantil y otros materiales dañinos que pueden facilitar actos ilegales y violentos, y se comprometen a tomar más medidas para proteger a los ciudadanos de estos riesgos.
En línea con el con el Plan de Acción del G7 aprobado en 2021 para combatir la explotación y abuso sexual infantil, se insta a la colaboración con la industria de tecnologías de la información y la comunicación, y se llama a las empresas de este sector a implementar una serie de medidas concretas.
Entre ellas figura la adopción de herramientas para proteger a los usuarios menores de edad, como bloquear el acceso por defecto a determinados contenidos o mejorar los procesos de identificación de usuarios y de detección de contenidos dañinos.
También se pide a las empresas una mayor colaboración con las fuerzas de seguridad de cada territorio donde operen para facilitar la detención de usuarios que vulneren las legislaciones contra la explotación sexual de menores o la pornografía infantil.
En el mismo sentido, se señalan los “desafíos” presentados por las tecnologías emergentes como las inteligencias artificiales generativas de texto, foto y vídeo, que conllevan potenciales problemas para la propiedad intelectual o nuevos delitos informáticos de fraude, “phishing” o “ransomware”.
Los ministros del G7 señalan en particular a Rusia y China por acoger a ciberdelincuentes responsables de robos de propiedad intelectual y de diversos tipos de ataques informáticos, y subraya la necesidad de reforzar la cooperación internacional contra los mismos.
El documento adoptado hoy también señala el incremento de los fraudes transfronterizos cometidos a través de redes sociales o de llamadas telefónicas, un problema creciente que requiere también de una mejor coordinación entre el Grupo de los Siete y otros países, según destacan los ministros.
En la sesión específica de reuniones dedicada a este tema se destacaron que los daños económicos generados por los fraudes telefónicos o vía internet ascienden cada año unos 2,600 millones de euros en el Reino Unido o a cerca de 900 millones de yenes en Estados Unidos.
LEA TAMBIÉN: Países de la OCDE mantienen crecimiento del 0.5 % del PBI en el tercer trimestre