El magnate Oleg Deripaska, del gigante del aluminio Rusal pidió el fin del “capitalismo de Estado” en Rusia ante la crisis provocada por las sanciones occidentales, tras la invasión rusa de Ucrania.
“Es una verdadera crisis, y se necesitan verdaderos expertos en crisis hay que cambiar absolutamente de política económica y poner fin a todo este capitalismo de Estado”, escribió en Telegram el multimillonario creador del gigante del aluminio Rusal.
Contrariamente al 2014 cuando se aplicaron las primeras sanciones adoptadas luego de la anexión de la península ucraniana de Crimea por Rusia, “ya no es posible esperar”, añadió Deripaska, que hace parte de las 50 personas más ricas de Rusia.
Dijo que espera de la parte del gobierno “aclaraciones y comentarios claros sobre la política económica de los tres próximos meses”.
Se trata de una excepcional crítica de la elite económica al Kremlin desde la llegada al poder de Vladimir Putin.
Otro multimillonario ruso, Oleg Tinkov, fundador del banco Tinkoff, también criticó la invasión de Ucrania en un mensaje publicado el lunes.
“Hoy, en Ucrania, inocentes mueren cada día, ¡es impensable e inaceptable!”, afirmó en Instagram, y pidió “gastar dinero para atender a la gente, para la investigación contra el cáncer y no para hacer la guerra”.
Uno de los hombres más ricos de Rusia, Roman Abramovitch, “fue contactado por Ucrania para ayudar a encontrar una solución y está trabajando en eso desde entonces”, indicó su portavoz Rola Brentlin.
El domingo el millonario ruso Mijail Fridman denunció la guerra en Ucrania en una carta a los empleados de su fondo LetterOne.
“Estoy convencido de que la guerra nunca debe ser la respuesta. Esta crisis va a costar vidas y devastará a dos naciones hermanas desde hace centenares de años”, escribió, y espera que se acabe este “derramamiento de sangre”.
Estas tomas de posición ocurren cuando los países occidentales decidieron ampliar las sanciones contra Rusia a los magnates financieros e industriales.