Un supuesto ataque de rebeldes hutíes de Yemen golpeó un barco en el mar Rojo el lunes mientras un nuevo portaaviones estadounidense se dirigía a la región para prestar seguridad a la crucial ruta comercial internacional, que sufre ataques desde el estallido de la guerra entre Israel y Hamás hace nueve meses.
El capitán del barco reportó ataques de tres embarcaciones pequeñas, dos de las cuales tenían tripulación y otra no, cerca de la costa de Al Hudaydah, Yemen, según la oficina militar británica de Operaciones de Comercio Marítimo (UKMTO, por sus siglas en inglés).
La “pequeña embarcación no tripulada chocó con el barco dos veces y los dos pequeños botes tripulados dispararon al barco”, indicó la UKMTO. “El barco realizó medidas de autoprotección, tras 15 minutos la embarcación pequeña abortó el ataque”.
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El capitán reportó después dos rondas distintas de ataques de misiles, aproximadamente con 45 minutos de separación, que estallaron cerca del buque. El barco, cuyo nombre y bandera no se publicaron, y toda la tripulación estaban a salvo, según dijo la UKMTO en una advertencia a los marineros.
Los hutíes no hicieron comentarios en un primer momento. Sin embargo, pueden tardar horas o incluso días en reivindicar un ataque.
El portaaviones USS Theodore Roosvelt se dirigía a Oriente Medio para sustituir al Dwight D. Eisenhower, que pasó varios meses en el mar Rojo para hacer frente a los hutíes.
El Comando Central de Estados Unidos dijo en un comunicado el domingo que sus fuerzas habían destruido dos aeronaves hutíes no tripuladas y un dron acuático en el mar Rojo.
Los rebeldes han atacado a más de 70 barcos con misiles y drones en una campaña que ha matado a cuatro marinos. Desde noviembre han tomado un barco y hundido dos.
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El número de ataques hutíes a embarcaciones mercantes subió en junio a cifras inéditas desde diciembre, según el Centro Marítimo de Información Conjunta, una coalición supervisada por la Armada estadounidense. Estados Unidos ha liderado bombardeos contra los hutíes desde enero, con una serie de ataques el 30 de mayo que mató al menos a 16 personas e hirió a otros 42, según los rebeldes.
Los hutíes mantienen que atacan barcos vinculados con Israel, Estados Unidos o Reino Unido como parte de su apoyo al grupo armado Hamás en su guerra contra Israel. Sin embargo, muchos de los barcos atacados tienen poca o ninguna relación con la guerra y algunos se dirigían a Irán, un país que apoya a los hutíes.
Los rebeldes dijeron la semana pasada que habían lanzado misiles contra un portacontenedores con bandera estadounidense en el golfo de Adén, en lo que las autoridades consideraban el ataque a mayor distancia de los hutíes contra un barco estadounidense cerca del mar Arábigo.
El Centro Marítimo de Información Conjunta identificó al barco como el Maersk Sentosa. Maersk, una firma danesa que es la empresa de transporte de contenedores más grande del mundo, confirmó a The Associated Press que su barco había sido atacado.
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