Los operadores de contratos a futuro argentinos están dejando de cubrirse ante una devaluación del peso después de que el ministro de Economía dijera esta semana que planea frenar la tasa de depreciación de la moneda.
La tasa de devaluación de los contratos a futuro NDF con vencimiento en seis meses se desplomó esta semana a 51%, frente al 84% de enero. La variación se debió a una declaración realizada el martes por el ministro de Economía, Martín Guzmán, acerca de que él buscaba que el tipo de cambio nominal oficial promediara 102.4 por dólar para fin de año.
Con el peso cotizando a aproximadamente 89 por dólar, eso representa una depreciación nominal de aproximadamente 25%, aún lejos de las expectativas de los operadores de 126 por dólar para fin de año. La tasa de contado con liquidación ya se depreció 3.7% en enero, lo que significa que debería debilitarse más lentamente que en los próximos meses. La consultora local Eco Go SA estima que la depreciación promedio del crawling peg debería variar 1.3% por mes para alcanzar el pronóstico del ministro.
“El plan es frenar el ritmo crawling peg para reducir la inflación y contener las negociaciones salariales”, dijo Federico Furiase, director de Eco Go en Buenos Aires. “El Gobierno aún no está dispuesto a pagar el costo de una subida de tasas”.
El banco central controla el tipo de cambio de Argentina a través del sistema de crawling peg desde que el Gobierno estableció controles de capital en septiembre del 2019. El peso spot se debilitó 40% en el 2020 en medio de una inflación casi tan alta. Para los analistas locales, la decisión del Gobierno de frenar el crawling peg es parte de una estrategia para anclar los precios antes de las elecciones legislativas que se celebrarán en octubre.
Esto es lo que dicen los analistas:
Tomás Ruiz Palacios, estratega de Cohen SA
Con la inflación en aumento, el Gobierno intenta una nueva estrategia: anclar el tipo de cambio para controlar la dinámica de preciosEl Gobierno endureció el control cambiario con regulaciones más estrictas, moderó levemente la dinámica del gasto y aumentó el financiamiento mediante colocaciones de deuda en pesos en el mercado local. Esto eliminó la presión del mercado cambiario y gradualmente contuvo las operaciones en el mercado paralelo. Al mismo tiempo, el contexto internacional, con los commodities agrícolas alcanzando el mejor nivel en los últimos 5 años, contribuyó a que las expectativas de un discreto salto en el tipo de cambio fueran menguando
Adrián Yarde Buller, Economista jefe de SBS Group
Esta semana comenzamos a ver tasas de devaluación mucho más bajas que las de la semana pasada, generando la sospecha de que la estrategia podría estar cambiando. Hasta ahora, la tasa de devaluación ha seguido de cerca la inflación para evitar una apreciación del tipo de cambio real
Mateo Reschini, analista de investigación sénior de StoneX Argentina
El Gobierno intentará frenar la depreciación del tipo de cambio para mantener a raya la inflación si intenta hacer la reforma necesaria (como eliminar los subsidios y reducir el gasto público). En el otro lado del espectro, podrían usar esto para reducir la inflación si ni siquiera intentan volver a encaminar la economía
Federico Furiase, director de la consultora Eco Go SA
El ARS se ha ido debilitando a una tasa del 4% mensual. El crawling peg debería comenzar a avanzar al 1,3% promedio mensual desde marzo para llegar a los US$102.4 en diciembre que mencionó Guzmán. El plan es frenar el ritmo del crawling peg para bajar la inflación y contener la lucha salarial, mientras negocian aumentos salariales utilizando como referencia el 30% anual. El Gobierno aún no está dispuesto a pagar el costo de una subida de tasas. El riesgo sigue siendo la brecha cambiaria al mismo tiempo que el banco central sigue sin querer subir la tasa por ahora y con un mercado que sabe que no habrá ajuste fiscal en el año electoral.