
El peso de Chile se desplomó el miércoles después de que el banco central anunciara planes para aumentar sus reservas internacionales, sorprendiendo a los inversionistas tras haber reiterado en varias ocasiones que se sentía cómodo con el nivel de divisas.
La moneda cayó hasta un 1.4% en las primeras operaciones, liderando las pérdidas en una canasta de 23 monedas de países en desarrollo que sigue Bloomberg.
A última hora del martes, la autoridad monetaria anunció que comprará hasta US$ 25 millones diarios con el objetivo de acumular US$ 18,500 millones en un plazo de tres años. La medida busca reemplazar gradualmente las líneas de crédito en moneda extranjera por reservas propias, según un comunicado. El programa, que comenzará el 8 de agosto, no busca intervenir en el mercado cambiario, aclararon los responsables del banco.
“El momento es un poco sorprendente”, dijo Alejandro Cuadrado, jefe de estrategia global de divisas y Latinoamérica del Banco Bilbao Vizcaya Argentaria SA en Nueva York. “En general, en un mercado con un volumen diario cercano a los US$ 1,000 millones, el impacto debería ser limitado, pero establece una tendencia ligeramente alcista, con USDCLP980 aún como referencia de resistencia”.
El peso ya enfrenta presiones derivadas de la volatilidad global, influenciada por las fluctuaciones del precio del cobre, principal producto de exportación del país, y por las expectativas de recortes de tasas de la Reserva Federal.

A nivel local, la reanudación del ciclo de flexibilización monetaria también genera presión. El anuncio se produce luego de que la presidenta del banco central, Rosanna Costa, afirmara en junio que la entidad se sentía cómoda con su nivel de reservas internacionales.
Este es el tercer programa en cinco años anunciado por el banco central para acumular reservas. En junio de 2023, las autoridades dieron a conocer un plan para comprar US$ 40 millones diarios con la meta de alcanzar US$ 10,000 millones. El programa se suspendió en octubre de 2023, tras acumular US$ 3,700 millones, debido a “crecientes tensiones en los mercados financieros globales”.
En enero de 2021, se lanzó otro plan con compras diarias por US$ 40 millones, con una meta de US$ 12,000 millones en reservas. Este programa también se suspendió en octubre de 2021, debido a un aumento de la volatilidad.
La autoridad monetaria indicó que el plan anunciado el martes se revisará cada seis meses y podría ajustarse según las condiciones del mercado.
Los funcionarios “quizás quieran suavizar el impacto con una cantidad diaria menor, pero eso implica que el banco central quiere aprovechar la tendencia al debilitamiento del dólar para acumular reservas”, dijo Ning Sun, estratega sénior de mercados emergentes en State Street Global Markets en Boston.