El cambio climático y la regulación ambiental serán un foco del cambio estructural que propone el gobierno del izquierdista Gabriel Boric, lo que pondrá en la mira a las grandes mineras que operan en Chile.
En su primer discurso tras una contundente victoria, el legislador de 35 años subrayó el impacto del cambio climático y dijo que no desea proyectos que “destruyan” al país y que han derivado en lugares saturados de contaminación.
Además de la discusión para aumentar la carga impositiva de la minería, el actual Congreso ha dejado pendiente un debate sobre una ley de glaciares, ambos ahora tendrán el respaldo del nuevo Gobierno tras la resistencia de la actual administración de centroderecha.
“El cambio climático, queridos compatriotas, no es una invención. Está acá, y genera efectos directos sobre nuestras vidas y las de futuras generaciones”, dijo Boric tras la victoria electoral.
Las mineras han sido largo tiempo criticadas por comunidades y ambientalistas por la demanda de agua para sus operaciones, la instalación de relaves y su eventual impacto en los glaciares cordilleranos.
“Si hay algo que puede tener impacto relevante en el negocio minero, en mi opinión, deberíamos partir mirando el tema ambientalista”, comentó Juan Carlos Guajardo, jefe de la consultora Plusmining.
El Congreso ha dilatado la discusión de la ley de protección de glaciares que, según la redacción original, podría poner en peligro incluso algunas minas que están produciendo y restringir nuevas operaciones en la Cordillera de Los Andes.
Andina y El Teniente de la estatal Codelco - la mayor productora mundial de cobre-, Los Bronces de Anglo American, Los Pelambres de Antofagasta y Caserones, vinculada JX Nippon Mining, son los proyectos que podrían verse afectado si se aprueba el texto legal sin ajustes.
Alejandra Wood, directora ejecutiva del Centro de Estudios del Cobre (Cesco), espera que el nuevo gobierno aproveche la oportunidad que tiene ese metal en la transición energética y eléctrica “sentando las bases para una mayor inversión, una mejor productividad e impulsar una actividad cuidadosa de su huella socioambiental”.
Boric apuntó además directamente al controvertido proyecto de hierro y cobre Dominga como un ejemplo del tipo de iniciativas que no quiere.
“Destruir el mundo es destruirnos a nosotros mismos. No queremos más zonas de sacrificio, no queremos proyectos que destruyan nuestro país, que destruyan a las comunidades y lo ejemplificamos en un caso que ha sido simbólico: No a Dominga”, afirmó ante la multitud que celebraba su victoria la noche del domingo.
La Sociedad Nacional de Minería (Sonami), que agrupa a las empresas del sector, no quiso comentar sobre el señalamiento del presidente electo al proyecto.
En las primeras operaciones bursátiles del lunes, las acciones de SQM, segunda mayor productora mundial de litio, caían más de 10% en medio una caída general del mercado tras el triunfo de Boric, quien ha criticado la privatización de la explotación de recursos naturales como el metal ligero y propone crear una empresa estatal para impulsar su producción.
Las eventualmente más estrictas normas ambientales afectarían tanto al sector público como al privado.
En la costa central de Chile Codelco posee la fundición y refinería Ventanas en una de las denominadas “zonas de sacrificio” debido a los altos niveles de contaminación y donde la petrolera estatal ENAP ha sido imputada por incumplimientos ambientales.
Todo esto ocurre cuando los precios de materias primas como el cobre suben con fuerza en los mercados internacionales, lo que ha despertado el apetito de legisladores para obtener una mayor tajada de los recursos que se extraen del país.
“Está claro que la nueva riqueza y los impuestos ambientales están en el horizonte, mientras que la iniciativa de regalías mineras obtendrá un impulso de la presidencia”, dijo la consultora Teneo en un informe.
Sin embargo, Boric advirtió de que los ajustes ambientales y la mejora en la calidad de vida tendrán que ser graduales.
“No todo puede hacerse al mismo tiempo y tendremos que priorizar para ir logrando avances que nos permitan mejorar paso a paso la vida de nuestra gente. No será fácil, no será rápido, pero nuestro compromiso es avanzar por esa senda con esperanza y responsabilidad”, afirmó.