A una semana de los comicios regionales y locales en Venezuela, aumentan las denuncias por irregularidades en la campaña, pese a contar con garantías que la oposición demandaba desde hace años, como la observación internacional de la Unión Europea (UE) y el Centro Carter, y un Consejo Nacional Electoral (CNE) más plural y diverso.
Las reclamaciones y denuncias comenzaron ya en el momento en que se anunció la convocatoria a elecciones, el pasado 13 de mayo.
A continuación, cinco claves del descontento:
1.- Campaña anticipada
Tanto candidatos de la oposición como del oficialismo han realizado campaña casi desde que se anunciara la fecha de las elecciones. El artículo 75 de la Ley de Procesos Electorales establece que no se permitirá propaganda que “se produzca fuera del lapso” establecido para ello.
Tras esta convocatoria, los opositores, que enfrentan desde hace meses divisiones y falta de claridad en su estrategia contra el Gobierno, han intentado retomar, a través de visitas a comunidades, concentraciones, redes sociales y promesas de “cambio”, el contacto con la gente, tras desconectarse de la población, producto de la pandemia por COVID-19 y sus disputas internas.
Mientras, el chavismo ha hecho campaña igualmente a través de los mismos medios, redes sociales y discursos difundidos ampliamente con promesas de mejoría económica o de las aptitudes que pueda tener cualquiera de sus candidatos.
2.- El uso de recursos del estado
Una de las denuncias más recurrentes a lo largo del proceso electoral es el uso de los recursos del Estado venezolano por parte del oficialismo para hacer campaña. Dos de los cinco rectores del Consejo Nacional Electoral (CNE), ambos afines a la oposición, han llamado la atención por este motivo.
Los rectores Roberto Picón y Enrique Márquez han denunciado el uso de cuentas de Twitter de instituciones públicas, medios de comunicación del Estado, fachadas de entes estatales e incluso el discurso de funcionarios públicos para hacer propaganda a favor del partido de Gobierno, tanto antes, como durante la campaña.
La organización civil Súmate añade la “manipulación”, por medio de los beneficios sociales que entrega el Gobierno, a cambio de votos a favor de los candidatos chavistas. Sin embargo, de momento, no se conocen sanciones por ninguno de estos motivos.
3.- La “parcialidad” en medios
Las autoridades venezolanas son constantemente criticadas por “confundir” el uso de los medios de comunicación y entes estatales con canales de difusión de propaganda del partido gubernamental y por ello, en momentos electorales, las denuncias de parcialidad y desequilibrio crecen.
Según una observación que ha hecho Súmate en los primeros días de la campaña formal, “más del 50% del total del monitoreo a (el canal estatal) Venezolana de Televisión es hacia la campaña del (gobernante) Partido Socialista Unido de Venezuela”.
La organización destaca, además, el “ventajismo” del chavismo, debido a que los medios audiovisuales, tanto privados como públicos, transmiten cualquier comparecencia o evento del presidente Nicolás Maduro o altos funcionarios sin que las mismas sean obligatorias. El presidente de Súmate, Francisco Castro, considera que se debe a las “presiones” gubernamentales sobre la prensa, dijo.
4.- Vetos a opositores
Aunque el CNE debe vigilar que se cumplan las normas de la campaña, los candidatos de oposición, especialmente los más críticos, se enfrentan a la dificultad de poder transmitir sus mensajes a tiempo o como desean.
La oposición ha denunciado en múltiples oportunidades, en campaña y fuera de ella, la censura a la que se enfrentan e, incluso, a las dificultades de acceder a sitios específicos, como ocurrió el pasado 10 de octubre cuando se celebró un ensayo electoral, y un grupo señalado de chavista intentó impedir la participación del opositor a la gobernación de Vargas, José Manuel Olivares.
Olivares se enfrentó, en esa ocasión, a empujones del grupo que impedía su acceso a un centro de votación, frente a las autoridades militares que vigilaban el proceso, sin que el hecho tuviera repercusiones.
5.- La “desinformación” del proceso y oferta electoral
Los llamados a votar por parte del ente, los partidos y candidatos son constantes, pero Súmate ve “desinformación” y opacidad en el proceso y la oferta electoral, pues considera que no se difunde lo suficiente.
“Estamos en medio de un proceso con mucha desinformación sobre, por ejemplo, las ferias electorales (lugares donde enseñan a los ciudadanos cómo usar el sistema automatizado de votación), sobre la oferta electoral. Hay mucha desinformación en términos de los mecanismos para votar, sobre todo en una elección tan compleja”, dijo Castro.
Las autoridades del CNE han difundido en sus redes sociales información sobre esto, pero no así en canales de televisión y radio.