Latinoamérica vive un momento económico complicado y es la región “más desigual” del mundo, pero las posibilidades de inversión que tiene el sector privado son “enormes” y pueden ayudar a su desarrollo sostenible e inclusivo.
Así lo aseguró Alfonso García Mora, vicepresidente regional para Latinoamérica y Europa de la Corporación Financiera Internacional (IFC), el organismo del Grupo Banco Mundial encargado de incentivar el crecimiento del sector privado en los países en desarrollo.
La capacidad limitada de los gobiernos
García Mora cree que los países latinoamericanos deben ayudarse del sector privado porque la situación fiscal de muchos de ellos es “bastante limitada”: Están “al límite” de su capacidad de endeudamiento.
Por eso consideró que los Gobiernos deben dejar entrar a la inversión privada en muchos proyectos en los que no alcanza o no es necesaria la pública.
Los tres grandes objetivos de la IFC son “inclusión, competencia y sostenibilidad” y todos ellos, recalcó, requieren del sector privado para ser una realidad.
Una de las inversiones para cumplir esos objetivos es la destinada a infraestructuras, donde América Latina está aún a “años luz” de otras regiones como Asia, y no hay dinero público suficiente para los esfuerzos de inversión.
Como ejemplo de las colaboraciones público/privadas que ha impulsado la IFC en esta materia García Mora recuerda la “espectacular” inversión que se hizo en Sao Paulo para el saneamiento y la gestión del agua, y que va alineada tanto a la lucha contra el cambio climático como a cubrir la necesidad de una infraestructura básica.
Otro ejemplo es el proyecto en marcha para el transporte urbano eléctrico en Santiago de Chile, una de las ciudades con más polución del mundo.
Brasil, de vuelta
Precisamente, la apuesta por la sostenibilidad y la lucha contra el cambio climático deben ser primordiales en un momento como el actual. Por eso García Mora celebra que el próximo Gobierno de Brasil presidido por Luis Inazio Lula da Silva vuelva a estar presente en esta batalla.
“Es genial ver que Brasil vuelve a la primera línea de fuego en la sostenibilidad y el cambio climático. Tenemos el pulmón del mundo en el Amazonas y enormes problemas de biodiversidad, tenemos que luchar por la reforestación del Amazonas y por conservar la biodiversidad”, dijo.
Y si Brasil toma “esa bandera de la sostenibilidad” será “un enorme cambio para la región”.
En cualquier caso, para el economista español da igual el color político de los países, y al ser preguntado por este momento en el que buena parte de la región ha apostado por gobiernos de izquierda recalcó que lo que al sector privado le importa es la “claridad y marcos regulatorios estables” en los que poder invertir.
García Mora subrayó además la “madurez democrática” de los países y también de los propios inversores, frente a otros tiempos en los que los giros políticos provocaban fuertes reacciones en los mercados.
Recuerda por ejemplo la volatilidad del real brasileño hace veinte años, en los días previos a la primera victoria de Lula, lo que contrasta con estas últimas elecciones, en las que el resultado “ni se notó” y la estabilidad de los mercados fue “tremenda”.
“Trillones” de inversión privada para el fondo de la COP27
Pocos días después del final de la última cumbre del clima, la COP27, García Mora celebra el compromiso de crear un fondo para paliar las pérdidas y daños del cambio climático pero advierte de que no se puede sufragar solo con dinero público, porque hay que movilizar “trillones de dólares” y eso solo es posible con capital privado.
De ahí el papel que va a tener también la IFC, “el único banco multilateral mundial, el mayor financiador”.
Subrayó en este sentido que “por cada euro que un donante concede para disminuir el riesgo” inversor la IFC “moviliza once”, de ahí su “enorme impacto”.
En cualquier caso, insistió, quedan “muchas reuniones” hasta saber cómo se va a implementar el fondo, pero ya ha quedado clara la importancia del multilateralismo en esta lucha.
“Hace unos años se cuestionaba el rol de las instituciones multilaterales y de los acuerdos multilaterales”, pero ahora “nos hemos dado cuenta de que esta guerra solo se gana si todos jugamos juntos, es necesario coordinar todos los esfuerzos”, señaló.
Empezar ya a pensar en la reconstrucción de Ucrania
Como vicepresidente regional de la IFC también para Europa, García Mora consideró que hay que “movilizar el sector privado” para financiar la reconstrucción de Ucrania, un país en el que han desaparecido el 30 % de las empresas según las estimaciones más prudentes, porque “seguro que son muchas más”.
Y aunque el objetivo más inmediato es ayudar al menos a “mantener las luces encendidas” del tejido productivo, a medio y largo plazo se debe empezar a pensar en el “Plan Marshall” que va a requerir Ucrania, y en el que el sector privado tendrá que jugar un papel “fundamental”.
“No podemos esperar a que acabe la guerra” para hacerlo, dijo García Mora, para quien el plan debe ser ordenado y prepararse cuanto antes.
Fuente: EFE