El Gobierno de Argentina busca reabrir con límites sus exportaciones de carne bovina la semana próxima, que hace casi un mes suspendió los embarques al exterior para intentar contener los precios domésticos.
Argentina es el quinto exportador mundial de carne de res y el segundo proveedor internacional del gigantesco mercado chino, pero el alza en el precio local de los alimentos se ha vuelto un dolor de cabeza para un Gobierno que enfrentará comicios de medio término a fin de año.
A mediados de mayo, las autoridades suspendieron por 30 días los embarques ante las dramáticas subidas en los precios locales de carne. Desde entonces, funcionarios y representantes de la industria han mantenido reuniones para que se reanuden las exportaciones.
“La idea es justamente que, con un nuevo esquema de reglas de juego que estamos terminando de ajustar, poder la semana que viene retomar el camino a la exportación”, dijo el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas.
Al ser consultado si la reapertura sería con límites, Kulfas señaló que “la idea es justamente que se pueda volver a exportar carne, pero lo vamos a ir haciendo con un esquema que nos permita garantizar una mayor presencia de carne en el mercado interno”.
El ministro agregó que los detalles de la reapertura serían informados el jueves o el viernes. Una fuente del Gobierno dijo que se esperaba un próximo anuncio de Kulfas.
El miércoles, una fuente del sector exportador de carnes anticipó que el sector había logrado un principio de acuerdo sobre un monto que permitiría reabrir el mercado de exportación.
Un medio local había señalado que el Gobierno de centroizquierda propuso a los frigoríficos exportar durante junio y julio el 50% del volumen habitual, lo que el miércoles fue confirmado a Reuters por una fuente de la industria.
Según los últimos datos oficiales, Argentina exportó en abril 69,514 toneladas de carne bovina. En el primer cuatrimestre, los embarques del alimento sumaron 278,593 toneladas, el 28.8% del total producido. De ese volumen, el 76.6% tuvo como destino a China.
El presidente argentino, Alberto Fernández, ha apuntado contra la demanda del mercado internacional por las alzas en los precios locales de la carne, que en los últimos doce meses hasta abril subieron entre 60% y 70%, según el ente oficial de estadísticas.
Argentina padece hace años una recesión con alta inflación. Según datos oficiales, el país acumula un alza de precios al consumidor del 17.6% en el primer cuatrimestre del año y del 46.3% en los últimos 12 meses, lo que ha arrojado a más del 40% de la población a la pobreza.
El problema se ha vuelto una seria preocupación para el Gobierno de cara a las elecciones de medio término de noviembre.