Es probable que, este año, el mundo genere una cantidad récord de electricidad proveniente de la fuente más sucia que existe, lo que indica la larga distancia que todavía debe recorrer la transición energética en la lucha contra el cambio climático.
Se estima que la generación a carbón registrará un alza de 9% frente al año pasado, según un informe de la Agencia Internacional de Energía (AIE) publicado el viernes. Ese giro tras las caídas de los dos años anteriores amenaza el avance que ha logrado el mundo para alcanzar el cero neto de emisiones para 2050, indicó la organización.
Estados Unidos y la Unión Europea registraron los mayores aumentos en el uso de carbón, con alzas de cerca de 20% cada uno; seguidos por India, con 12%; y China, el mayor consumidor del mundo, con 9%, estimó la AIE. El retroceso recibe el impulso de la recuperación económica tras la pandemia de COVID-19, que está superando la capacidad de las fuentes de energía bajas en carbono para mantener el suministro.
“El carbón es la fuente más grande de emisiones globales de carbono, y el nivel históricamente alto de generación de energía a carbón de este año es una preocupante señal de lo lejos que está el mundo en sus esfuerzos por lograr que las emisiones disminuyan hacia cero”, dijo el director ejecutivo de la AIE, Fatih Birol.
Los precios récord del gas natural han aumentado la dependencia de otras fuentes, como el carbón, lo que ha dado paso a que se inste a inversiones más rápidas en energías renovables. Los precios de la energía en Europa se han triplicado con creces en los últimos seis meses y se ha vuelto más rentable quemar carbón que gas. Sin embargo, las empresas de servicios públicos han enfrentado dificultades para conseguirlo pese a que China y EE.UU. están incrementando su producción.
Ahora se estima que, en 2024, las emisiones de dióxido de carbono derivadas de la quema de carbón serán al menos 3,000 millones de toneladas mayores que en un escenario en que se alcance el cero neto para 2050, según el informe. La AIE espera que el punto álgido del carbón se produzca el próximo año, con 8,110 millones de toneladas, y que las mayores alzas en la producción provengan de China, Rusia y Pakistán.
La AIE, con sede en París, señaló en mayo que el desarrollo de nuevas fuentes de petróleo, gas y carbón debe detenerse este año si el mundo quiere cumplir los objetivos de emisiones en línea con el Acuerdo de París. Activistas climáticos se sintieron consternados en noviembre cuando se frustró una aspiración clave de la cumbre climática COP26 de las Naciones Unidas en Escocia para dar paso a un compromiso sobre “reducir gradualmente” —en lugar de “eliminar”— el consumo de carbón. Tras eso, la Administración del presidente estadounidense, Joe Biden, suspendió la ayuda federal a nuevos proyectos de combustibles fósiles en el extranjero.
Algunos bancos han prometido eliminar gradualmente su financiación del carbón, aunque los activistas quieren ver una mayor urgencia. Este año, la demanda de carbón en general —tanto para la generación de energía como para la producción de cemento y acero— se elevará 6%, según la AIE.
Esa demanda podría batir un récord el próximo año, dependiendo del crecimiento económico y los patrones climáticos, indicó la agencia.
Las disparidades regionales en el uso se están manifestando a nivel mundial a medida que Europa cierra las centrales eléctricas de carbón mientras China e India aumentan la producción. La Unión Europea intensificó su compromiso climático en julio, apuntando a una caída del 55% en emisiones de gases de efecto invernadero para 2030 frente a una base de 1990, con foco en una transición a fuentes más limpias. Es un objetivo difícil, especialmente considerando que países como Polonia y la República Checa utilizan principalmente con carbón y lignito.
Por ahora, China representa aproximadamente la mitad de la producción mundial de carbón y necesita satisfacer la creciente demanda interna. El Gobierno ha presionado a las mineras para que reduzcan los precios y disminuyan el costo de la quema de carbón durante la crisis energética de este año, que provocó apagones y racionamiento en el país.
“Es decepcionante que la energía a carbón pueda alcanzar un máximo récord en el mismo año en que los países acordaron eliminarla”, dijo Dave Jones, líder del programa global del grupo de expertos en clima Ember. “La energía a carbón inevitablemente comenzará a disminuir pronto: China se comprometió a comenzar a reducir el carbón en 2025, mientras que el enorme objetivo de energías renovables de India debería eliminar la necesidad de más carbón”.