El precio del cobre pasó brevemente la barrera de los US$ 10,000 la tonelada este jueves, una cota no alcanzada desde febrero del 2011, impulsado por la fuerte demanda china y las interrupciones de la oferta en esta semana en Chile, el mayor productor del mundo.
El precio del metal rojo, uno de los barómetros de la economía mundial, alcanzó el jueves a las 13H05 GMT el umbral de los US$ 10,000 la tonelada en el London Metal Exchange (LME).
El cobre logró este hito tras cuatro jornadas consecutivas trepando y desde el 1 de enero acumula un alza de 25%. En la tarde, la tonelada bajó y se situaba en US$ 9,876.
El apetito por el metal rojo proviene principalmente de China, que absorbe la mitad de la producción del planeta y que a mediados de abril anunció un récord de crecimiento del Producto Bruto Interno (PBI) en el primer trimestre de 18.3% sobre igual período del año anterior.
Elijah Oliveros-Rosen, economista senior para Latin America de S&P Global Ratings, explicó que esta alza se dio en un contexto de subida de todos los mercados y que hay un tema “cíclico” de una fuerte demanda tanto de Estados Unidos como de China para infraestructura.
A esto suma un factor estructural: una transición energética y un plan para reducir las emisiones de carbono van a requerir más cobre.
Neil Wilson, de Markets.com, señaló que la suba se debe a “una combinación del aumento de la demanda y los problemas de suministro en Chile”, el mayor productor del mundo.
Para Anna Stablum, de Marex Spectron, el alza de los precios también se debe a las perturbaciones en la oferta.
Esta semana las manifestaciones en Chile perturbaron la actividad en los puertos de San Antonio y de Iquique, cerca de donde están las grandes minas de cobre.
Pero la situación se calmó después de que el Tribunal Constitucional se pronunció a favor de las demandas de los manifestantes que pedían retirar una parte de sus fondos privados de pensiones.
Para el viernes hay un llamado a una huelga general - hecho antes del pronunciamiento de la corte - pero hay dudas sobre la convocatoria en un país que está mayoritariamente en cuarentena.
Stablum también señaló que el valor del cobre está siendo impulsado “por la debilidad del dólar”, que estimula la compra de metales cotizados en moneda estadounidense.
Efectos de la pandemia en Chile y Perú
Con respecto a los temores de que la oferta no cumpla con la demanda debido a problemas logísticos y por la pandemia en Chile y Perú, Oliveros-Rosen, indicó que en los últimos meses se han visto algunas perturbaciones. “Hay miedos de que la pandemia no esté bajo control”, indicó.
El analista de S&P Global Ratings también señaló que habitualmente cuando hay precios altos del cobre, los sindicatos lanzan huelgas para buscar una mejora en las condiciones de ingresos, y dada la inestabilidad social en Perú, ese miedo está presente.
Para Oliveros-Rosen, en el caso de Chile, no debería haber preocupaciones del lado de la oferta, ya que si bien ha habido huelgas en los últimos años y han afectado los precios, tienden a ser conflictos de corta duración.
En busca de nuevos récords
“El anterior récord de febrero del 2011 probablemente caerá”, señaló Daniel Briesemann, analista de Commerzbank, antes de que “se imponga una corrección”.
El 15 de febrero del 2011, la tonelada de cobre alcanzó los US$ 10,190 en el LME, un nivel nunca superado por ahora.
“Dentro de varios años, esperamos ver unos precios del cobre todavía más elevados, ya que tendrá, como muchos otros metales, un rol importante en los planes de descarbonización de numerosos países”, añadió Briesemann.
Muy utilizado en la industria, sobre todo para la creación de circuitos eléctricos, el cobre también es conocido como barómetro del estado de salud de la economía mundial, de ahí el sobrenombre de “Doctor Cobre” (Dr Copper).
En convalecencia desde su nivel más bajo en el 2020 --el 19 de marzo, a US$ 4,371 --, el metal rojo se ha recuperado totalmente y ha superado su situación antes de la pandemia de COVID-19.