
El desempleo en la eurozona disminuyó en 207,000 personas en abril, lo que sitúa la tasa en un 6.2%, mientras que la inflación se redujo tres décimas en mayo y quedó en un 1.9 %, la tasa más baja del año, según informó este martes la oficina estadística comunitaria Eurostat.
La oficina estadística de la Unión Europea (UE) estima que en abril estaban desempleadas 10.68 millones de personas en la zona euro.
En términos interanuales, la tasa de desempleo cayó dos décimas en los países que comparten la moneda única entre abril del 2024 (6.4%) y del 2025, mientras que en los Veintisiete el descenso fue de una décima (5.9% en abril del 2025 frente al 6% del mismo mes del 2025) y se mantuvo estable con respecto a marzo pasado, según Eurostat.
La oficina estadística comunitaria estimó en 12.9 millones las personas desempleadas en el club comunitario en abril pasado, cuando el desempleo en todo el bloque disminuyó en 188,000 personas en la UE con respecto a marzo.
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La disminución interanual fue de en 217,000 personas sin trabajo en la UE y de 343,000 en la zona del euro, señaló Eurostat.
España fue el Estado miembro de la UE con la mayor tasa de paro en abril pasado (10.9 %), la misma cifra que en marzo y por debajo del 11.6 % anotado en el cuarto mes del 2024.
Tras España, los países con mayor tasa de desempleo en abril fueron Finlandia (9.1 %), Suecia (8.6 %) y Estonia (8.3 %).
En contraste, las menores tasas de paro se registraron en Chequia (2.7 %), Malta (2.7 %), Polonia (3.3 %), Alemania (3.6 %) y Chipre (3.7 %).
Entre los Estados miembros de los que Eurostat publicó datos este martes, España fue el que tuvo una mayor tasa de desempleo juvenil (25.6 %) en abril, aunque el indicador bajó considerablemente frente al 26.5 % anotado en marzo y también fue inferior al 26.5 % de abril de 2024.
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La inflación cae en mayo
Por otro lado, la inflación de la eurozona se redujo tres décimas en mayo con respecto al mes anterior, hasta una tasa del 1.9 %, que es la menor en lo que va de año, gracias a la caída de los precios energéticos y la desaceleración en los servicio.
En concreto, la inflación de los servicios el mes pasado fue del 3.2%, ocho décimas menos que en abril, mientras que el precio de la energía cayó un 3.6%, frente al comportamiento estable que había mostrado un mes antes.
Por contra, el aumento del precio de los alimentos, el alcohol y el tabaco creció hasta el 3.3%, tres décimas por encima de la tasa observada en abril, mientras que la de los bienes industriales no energéticos se mantuvo en el 0.6%.
La inflación subyacente en mayo, que excluye las categorías más volátiles como la energía y los alimentos y es la que utiliza el Banco Central Europeo (BCE) en sus decisiones de política monetaria, cayó en mayo hasta el 2.3%, cuatro décimas menos que en abril.
De esta forma, la inflación interanual de la eurozona se sitúa por primera vez en lo que va de año por debajo de del 2%, objetivo a medio plazo del BCE, y es la tasa más baja desde septiembre del 2024, cuando el incremento de los precios fue del 1.7%.
La eurozona abrió el 2025 con una inflación interanual del 2.5% en enero, que se redujo dos décimas en febrero hasta el 2.3% y cayó después una décima al 2.2% en el que se situó tanto en marzo como en abril.
Por países, la menor inflación en mayo fue la registrada en Chipre, con una tasa interanual del 0.4%, seguida de la de Francia (0.6%), Irlanda (1.4%), Portugal (1.7%) y España, Italia y Eslovenia (los tres con una inflación del 1.9%).
Por encima de la media se situaron Alemania, Finlandia y Luxemburgo (2.1%), Malta (2.6%), Bélgica (2.8%), Países Bajos, Austria y Lituania (3%), Grecia (3.3%), Letonia (3.7%), Croacia y Eslovaquia (4.3%) y Estonia (4.6%).
Estos datos llegan dos días antes de una nueva reunión del Consejo de Gobierno del BCE, en la que el mercado espera un nuevo recorte de los tipos de interés de un cuarto de punto, hasta el 2% en el caso del tipo depósito, la referencia para su política monetaria.
La decisión que tome el BCE el jueves también estará dominada por la incertidumbre generada por la guerra comercial abierta por Estados Unidos, especialmente después de que Donald Trump anunciara este fin de semana un incremento de los aranceles al acero y el aluminio del 25% al 50% a partir de este miércoles.