La embajadora de Cuba ante la Unión Europea (UE), Norma Goicochea, dijo este jueves esperar que el bloque tome "todas las medidas" para proteger a sus inversionistas en la isla, que se vean afectados por la ley estadounidense Helms-Burton, que permite a Estados Unidos presentar demandas judiciales en tribunales estadounidenses contra empresas cubanas.
"Nosotros no tememos una fuga de inversiones. Nosotros confiamos en que la UE tomará todas las medidas para proteger a sus inversionistas (...) y prevalezca la decisión de continuar los negocios con Cuba", aseguró Goicochea a la agencia AFP.
Desde el jueves, exiliados cubanos en Estados Unidos o empresas de este país pueden demandar a las compañías que obtuvieron beneficios gracias a las sociedades nacionalizadas después de 1959, en virtud del Título III de la ley Helms-Burton.
Esa disposición, activada por la administración de Donald Trump, había sido sistemáticamente suspendida desde su adopción por todos los presidentes estadounidenses para no causar fricciones con sus aliados.
"Nosotros esperamos que no existan afectaciones y que la decisión del empresariado de continuar las relaciones con Cuba se mantenga", aseguró la embajadora ante la UE, que aseguró no tener cifras de las posibles empresas afectadas.
La inversión extranjera es una de las prioridades de la isla socialista para desarrollar una economía en crisis y socavada por la escasez. Y la UE fue en 2017 el primer inversor extranjero, en sectores como el turismo o la construcción.
La UE prometió llevar el caso a la Organización Mundial del Comercio (OMC) y recordó que cuenta con el llamado estatuto de bloqueo, para esquivar la ejecución de sentencias estadounidenses y permitir a las empresas europeas resarcirse.
Goicochea expresó su confianza en la eficacia de este estatuto de bloqueo, pero expresó además el interés de Cuba en "cualquier instrumento [en la UE] que proteja las relaciones económicas, financieras y comerciales" con Cuba.
Cuba ya expresó en el pasado su interés por el INSTEX, un sistema de pago especial ideado por los países europeos para permitir a Teherán negociar con compañías de la UE, especialmente con las pequeñas y medianas empresas.
La diplomática cubana, en Bruselas desde fines de 2014, aprovechó para cargar por los motivos esgrimidos por Trump para activar la controvertida medida, asegurando que "no hay tropas cubanas en Venezuela".
"Trump y su administración utilizan toda clase de mentiras, engañan al pueblo norteamericano, al mundo para tratar de justificar esa política hacia Cuba", apuntó Goicochea, que reiteró la voluntad de La Habana a "negociar" con Washington.
En 2017, Cuba registró 600 millones de euros en inversión directa procedente de la UE, según la Comisión Europea. Ese mismo año, la isla atrajo US$ 2,000 millones, casi la mitad de lo necesario para estimular su economía.