El presidente francés, Emmanuel Macron, pidió expresamente a Estados Unidos que ponga fin a su prohibición de exportar vacunas y componentes de vacunas.
“Llamo muy claramente a Estados Unidos a poner fin a las prohibiciones a la exportación, no solo de vacunas, sino de componentes de estas vacunas, que impiden la producción”, dijo Macron, en una rueda de prensa al final de la cumbre social europea de Oporto (Portugal).
Recalcó que “la clave para producir vacunas más rápido para los países pobres y de ingresos medios es producir más. Eliminar las prohibiciones de exportación”.
El gobernante francés recordó que, además, Estados Unidos solo ha permitido salir de su territorio un 5% de las dosis que ha fabricado, y que únicamente han ido a sus vecinos Canadá y México.
“Debemos trabajar para que las vacunas sean un bien mundial”, recalcó Macron, quien insistió en que para producir más no basta con liberalizar las patentes, sino que es necesaria una transferencia de tecnología, algo que precisa tiempo.
En los últimos días, el presidente francés ha mostrado su contrariedad por la forma en la que el estadounidense Joe Biden ha acaparado la atención mundial con su propuesta para abrir las patentes de las vacunas.
Así, Macron recordó que la Unión Europea (UE) ha exportado la mitad de todas las vacunas que ha fabricado (200 millones dosis sobre 400), mientras que el Reino Unido no ha dejado salir ninguna, y Washington muy pocas.
El dirigente francés también señaló que Europa es el promotor de la plataforma para producir vacunas en África y “el mayor donante” mundial al sistema internacional COVAX para conseguir dosis para los países más pobres, al que ha aportado ya más de 50 millones de inyecciones.
Y no dejó de relacionar la velocidad con la que Estados Unidos y el Reino Unido están vacunado a la población, superior a la europea, con sus limitaciones a la salida de dosis. “Hemos sido más lentos porque hemos sido más generosos”, aseguró y recalcó: “Estoy a favor de la solidaridad internacional, que es la respuesta a la pandemia”.
Macron aseguró que sus reticencias sobre la liberalización de las patentes de las vacunas no tienen que ver con proteccionismo a la industria europea, ya que laboratorios como Pfizer, Moderna o Johnson & Johnson son estadounidenses, sino por cuál es puede ser la respuesta más rápida para fabricar más vacunas a nivel mundial.