Punggye-Ri.- Corea del Norte ha realizado lo que llamó la demolición de su sitio de ensayos nucleares el jueves con una serie de explosiones a lo largo de varias horas y en presencia de periodistas extranjeros.
Las explosiones en el lugar, situado en las montañas del noreste del país, afectaron principalmente tres túneles subterráneos y varias torres de observación.
El cierre había sido anunciado por el líder Kim Jong Un para antes de su cumbre con el presidente estadounidense Donald Trump, prevista para el mes próximo.
La demolición tuvo lugar al tiempo que Pyongyang lanzó una nueva salva verbal contra Washington, al calificar al vicepresidente Mike Pence de “pelele político” y afirmar que estaba tan dispuesto a encontrarse en un enfrentamiento nuclear como en la mesa de negociaciones.
La decisión del Norte de cerrar el sitio nuclear de Punggye-ri fue recibida con complacencia, como un gesto de Kim para dar un tono positivo a la cumbre. Con todo, no es una medida irreversible y debería haber muchas medidas más medidas significativas para satisfacer los reclamos de Trump de una verdadera desnuclearización.
Al traer a los medios extranjeros, principalmente la televisión, el Norte aparentemente espera que las imágenes del cierre - que incluyen las explosiones para cerrar las entradas a los túneles - sean transmitidas alrededor del mundo. Un equipo de TV de Associated Press fue parte del grupo.
El Norte no invitó a inspectores internacionales a la ceremonia, lo cual limitó su valor como una concesión seria.
El ataque a Pence, emitido en nombre de un alto funcionario de la cancillería, siguió a un fuerte regaño contra el nuevo asesor de seguridad nacional de Trump, John Bolton, y ha generado el temor de que se ha abierto una gran brecha entre los dos países cuando faltan apenas tres semanas para la cumbre del 12 de junio en Singapur.
En los dos casos, Pyongyang respondió a insinuaciones de que Corea del Norte podría acabar como Libia si no toma medidas concretas inmediatas e irreversibles para deshacerse de sus armas nucleares.
Según la agencia noticiosa oficial norcoreana, el viceministro del Exterior, Choe Son Hui, calificó de “ignorantes” y “estúpidas” las declaraciones Pence a Fox News en las que comparó a Corea del Norte con Libia. El país norafricano abandonó su programa en una etapa temprana, y pocos años después su dictador fue derrocado y asesinado.
El plan de la cumbre ha chocado con varios topes últimamente, con intercambio de insultos y endurecimiento de las posiciones. El lunes Trump insinuó que podría aplazarla o directamente cancelarla.
Con todo, parece que ambas partes quieren realizar el encuentro sin precedentes. Sería un gran logro para Trump y sobre todo para Kim, ya que tendría un encuentro de igual a igual con el presidente estadounidense en el escenario mundial.