El Gobierno de Colombia presentó el sábado al Congreso un proyecto de presupuesto de gastos para el 2024 por 502,5 billones de pesos (128,099 millones de dólares), un 18.9% superior al vigente para este año, informó el Ministerio de Hacienda.
De aprobarse, se trataría del presupuesto más alto en la historia del país sudamericano, comparado con uno de 422,8 billones de pesos (107,772 millones de dólares) que rige durante el 2023, incluida una adición aprobada por el legislativo en junio pasado.
El proyecto de ley, que deberá ser avalado por el Congreso antes del 20 de octubre, establece gastos de funcionamiento por 310,3 billones de pesos (79,094 millones de dólares), recursos para el servicio de deuda por 94,5 billones de pesos (24,091 millones de dólares) e inversiones por 97,7 billones de pesos (24,913 millones de dólares).
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Los recursos para el servicio de la deuda crecerán un 20.4% por los vencimientos previstos para el próximo año, dijo el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla.
“La estrategia de financiación del 2024 es fiscalmente responsable. Se fundamenta en aumentar el recaudo tributario con altos estándares de equidad y en elevar la calidad y eficiencia del gasto público”, dijo un comunicado del Ministerio de Hacienda.
La iniciativa busca destinar 57,4 billones de pesos (14,630 millones de dólares) al sistema estatal de pensiones e importantes recursos a proyectos de inversión social y a los sectores de salud, educación y vivienda.
Petro no cuenta en la actualidad con una coalición en el Congreso para impulsar sus proyectos, después de que la alianza conformada por partidos de izquierda, centro e incluso de derecha que lo respalda se desintegró a finales de abril.
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El presupuesto es consistente con unas metas para el próximo año de déficit fiscal del Gobierno Nacional Central de 4.5% del Producto Interno Bruto (PIB) y de crecimiento económico de 1,5%, establecidas en el Marco Fiscal de Mediano Plazo presentado a mediados de junio.
El presidente Gustavo Petro, el primer mandatario de izquierda en la historia de Colombia, prometió una serie de reformas económicas y sociales, entre las que se destacan una al sistema de salud, otra a las pensiones y una al régimen laboral -que inicialmente fue rechazada por el Congreso, pero que el Gobierno volverá a presentar-, para reducir la pobreza y la desigualdad.
Pero el independiente Comité Autónomo de la Regla Fiscal (CARF) alertó que el impacto en las finanzas derivado de la eventual aprobación de las reformas sumado a los mayores gastos que contempla el Gobierno el próximo año pondría en riesgo el cumplimiento de las metas fiscales del país.
(Con información de Reuters)
