La Unión Europea (UE) “necesita migrantes”, aunque algunos Estados no estén de acuerdo, pero el flujo migratorio “debe regularse”, aseguró hoy en Roma el alto representante comunitario para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, para quien no se puede permitir que las personas “se conviertan en un arma”, como ha hecho Bielorrusia.
“La inmigración es un gran problema con muchas caras, que debe regularse, no debe existir la percepción de un flujo incontrolado donde algunos obtienen beneficios, otros arriesgan sus vidas y a menudo son engañados: Europa está experimentando un invierno demográfico, se necesitan personas de fuera, pero para gestionarlo hace faltase una política común de inmigración y asilo”, dijo Borrell.
“Pero hasta ahora, lamento decirlo, los Estados miembros de la UE no se han puesto de acuerdo y las propuestas de la comisión no han sido aceptadas”, añadió en un foro internacional sobre el Mediterráneo organizado por el Ministerio italiano de Exteriores.
Borrell insistió en que lo que hace falta es “una forma de gestionar la inmigración, porque cada país defiende sus propias fronteras, pero también las de la UE; porque no todos son solicitantes de asilo, hay que estudiar la situación para tratar los casos de manera diferente”.
“El problema de la inmigración se ve exacerbado por situaciones como la de Bielorrusia, que ha llamado a personas de todo el mundo con falsas promesas. No podemos permitirnos eso, no podemos permitir que la gente se convierta en un arma” .
En su intervención, Borrell se refirió también a la situación de Libia, sobre la que destacó la necesidad que se celebren elecciones a pesar de las dificultades. “No es una varita mágica, pero trae legitimidad”, dijo, porque sino “cómo se reparten los recursos?, ¿cómo se gestiona el país?”, añadió, al asegurar que la UE “está lista para enviar observadores”.
Sobre Siria, comparó la situación con la de Afganistán: “Proporcionamos ayuda humanitaria a los sirios, pero eso no significa que vayamos a reconocer a (Bachar al) Asad; lo mismo vale para los afganos, proporcionamos ayuda, pero no es reconocimiento a los talibanes” porque “ganar la guerra no es suficiente para ser reconocido políticamente”.
Y sobre Irán, Borrell aseguró que la UE trabaja para “tratar de salvar el acuerdo” nuclear, que “es también un acuerdo económico” del que el expresidente de EEUU Donald Trump se retiró “sin tener en cuenta las consecuencias y hasta entonces Irán lo había respetado. Si ahora queremos que vuelva (...) hay que darle algo a cambio”.
“Los negociadores se han comprometido a regresar a Viena la próxima semana. Volvamos a la mesa y veamos las cifras reales que dan las agencias de energía” sobre el enriquecimiento de uranio iraní, dijo.