Argentina, con escasas reservas monetarias, debe enfrentar vencimientos con el FMI por unos US$ 3,400 millones entre el 31 de julio y el 1 de agosto, por lo que las negociaciones son a contrarreloj. (Foto: AFP)
Argentina, con escasas reservas monetarias, debe enfrentar vencimientos con el FMI por unos US$ 3,400 millones entre el 31 de julio y el 1 de agosto, por lo que las negociaciones son a contrarreloj. (Foto: AFP)

El jefe de Gabinete del Gobierno de y candidato a vicepresidente del país, Agustín Rossi, aseguró este sábado que los negociadores argentinos defenderán los intereses de la nación suramericana en las conversaciones en curso con el para cambiar ciertos términos del acuerdo de refinanciación firmado en marzo de 2022.

“Hay un fórmula muy fácil de conseguir un acuerdo rápido con el FMI, que es hacer y aceptar lo que diga el Fondo. Si está demorándose el acuerdo con el FMI es producto de que nuestros negociadores van a defender los intereses del conjunto de los argentinos”, aseguró Rossi en declaraciones radiales.

Desde hace varias semanas, Argentina negocia con el FMI introducir cambios en las metas fiscales, monetarias y de acumulación de reservas acordadas en 2022 y adelantar los desembolsos trimestrales estipulados en el acuerdo de facilidades extendidas, que permitió refinanciar deudas por US$ 44,000 millones.

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Este viernes, tras dialogar con la directora gerente del Fondo, Kristalina Georgieva, el presidente argentino, , admitió que las conversaciones con el organismo, lideradas por el ministro de Economía argentino y candidato presidencial, Sergio Massa, no eran fáciles, pero se mostró confiado en llegar a un entendimiento.

Argentina, que sufre serios desequilibrios macroeconómicos y, además, ha padecido durante el primer semestre del año los efectos de una severa sequía que impactó de lleno en sus exportaciones agrícolas -su principal fuente de ingresos-, ha experimentado dificultades para cumplir con las metas pactadas con el Fondo.

Del cumplimiento de esas metas depende la aprobación de las revisiones trimestrales que realiza el FMI, necesaria para que el organismo gire a Argentina los desembolsos que le permitan pagar los compromisos de deuda con el propio organismo.

Argentina, con escasas reservas monetarias, debe enfrentar vencimientos con el FMI por unos US$ 3,400 millones entre el 31 de julio y el 1 de agosto, por lo que las negociaciones son a contrarreloj.

Rossi, que secunda a Massa en la principal fórmula presidencial del oficialismo de cara a las elecciones primarias de agosto, no quiso dar precisiones sobre posibles medidas cambiarias en los próximos días tendentes a frenar la salida de reservas por la vía de importaciones y a incentivar la liquidación de exportaciones, para aumentar los ingresos de dólares.

Sin embargo, en declaraciones a la emisora AM 750, el jefe de Gabinete comentó que la pérdida de ingresos de divisas este año por US$ 20,000 millones como consecuencia del impacto de la sequía obliga a tomar decisiones “muchas veces creativas”, buscando que “lesionen lo menos posible la economía real”.

“Está claro que, como ha dicho Sergio Massa, nuestro objetivo como Gobierno va a ser pagarle (al FMI) el 100 % de la deuda para que podamos hacer política económica sin esta intervención del FMI, que siempre termina siendo claramente complicada”, añadió.

(Con información de EFE)

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