
La detección de gripe aviar en una granja avícola en el sur de Brasil está teniendo repercusiones en todo el mundo, reduciendo el suministro a consumidores voraces desde China hasta Europa.
Al menos 21 países o bloques económicos vetaron la compra de carne de pollo de todo Brasil por la detección de un brote de gripe aviar en una granja comercial en el sur del país, mientras que once tan solo suspendieron las importaciones de la región afectada, informaron este miércoles fuentes oficiales.
Los envíos a los principales destinos, que también incluyen México y Corea del Sur, fueron suspendidos mientras el mayor exportador mundial de pollo intenta detener la propagación de la mortal cepa H5N1. Hasta la fecha, las prohibiciones han cerrado mercados que representan más de US$ 4,000 millones anuales en ingresos por exportaciones, es decir, el 40% del total, según datos oficiales.
Reemplazar a Brasil no es fácil. La nación abastece más de un tercio del mercado mundial de exportación y su condición de país libre de gripe aviar, que mantiene desde hace mucho tiempo, había dado hasta ahora a los productores locales una ventaja frente a competidores como Estados Unidos en los últimos años.
“Cuando se priva a unos pocos grandes importadores de su mayor proveedor mundial, se les coloca en una posición de vulnerabilidad”, señaló João Otavio Figueiredo, analista de la consultora Datagro. Los compradores que suspendieron sus compras a Brasil pronto podrían ver precios más altos, añadió.

La demanda de pollo ha crecido a nivel mundial, ya que los consumidores buscan alternativas más baratas a la costosa carne de vacuno. Esto ha impulsado las ganancias de empresas como BRF SA y JBS SA en Brasil, así como de Tyson Foods Inc. en EE.UU. Se espera que el consumo de carne de pollo alcance niveles récord este año, según proyecciones del Departamento de Agricultura de EE.UU. (USDA, por sus siglas en inglés).
La oferta mundial de pollo se ha visto limitada por las bajas tasas de fertilidad de los huevos y varios brotes de gripe aviar. El virus, que ya ha provocado escasez de huevos en los supermercados estadounidenses, reducirá las exportaciones de pollo de EE.UU. a su nivel más bajo desde 2015, según previsiones del USDA.
En EE.UU., la fuerte demanda y la oferta limitada han provocado un aumento de los precios. Las pechugas de pollo cuestan alrededor de US$ 2.77 la libra, el precio más alto desde julio de 2022, según el USDA.
Las granjas comerciales en Brasil se habían mantenido hasta ahora a salvo del virus, que recientemente ha causado la muerte de decenas de millones de aves en todo el mundo. Según los datos del USDA, se preveía que aproximadamente dos tercios del crecimiento estimado de las exportaciones mundiales de pollo este año provinieran de Brasil.
Así era hasta la semana pasada, cuando se descubrió el virus en una granja comercial del estado sureño de Rio Grande do Sul. Y existe la preocupación de que pueda propagarse, ya que se están investigando casos sospechosos en el vecino estado de Santa Catarina y en el estado norteño de Tocantins.

China y Corea del Sur figuran entre los países más afectados. Ambas naciones, cuyas importaciones avícolas dependen en más de un 70% de Brasil, han implementado prohibiciones a nivel nacional. En cambio, países que aplicaron restricciones parciales, como Arabia Saudita, probablemente enfrenten un menor impacto.
Entre los países que suspendieron las compras del mayor productor y exportador mundial de pollo destaca China, principal destino del producto brasileño, con 562,200 toneladas importadas en 2024, el 10.5% del total, según la lista divulgada por el Ministerio de Agricultura.
La Asociación de Pollos de Engorde de Corea del Sur solicitó a las empresas afiliadas que aumentaran la producción y afirmó que la industria avícola hará “todo lo posible para estabilizar la oferta y la demanda”, según un comunicado. Mientras tanto, el Ministerio de Agricultura del país pidió a los importadores y minoristas que liberaran sus existencias mientras se estudian formas de aumentar el suministro interno.
Filipinas, que depende de Brasil para aproximadamente la mitad de sus importaciones de pollo, tratará de comprar carne a EE.UU., Polonia y Hungría, según declaró anteriormente un funcionario del gobierno.
China podría experimentar un aumento de los precios a corto plazo, especialmente de las patas y las alas de pollo, aunque las alzas parecen limitadas debido a la suficiencia de la oferta, según escribió el martes en un informe Sun Yanan, analista de la consultora industrial china SCI99.
La magnitud de las perturbaciones dependerá de la capacidad de Brasil para evitar la propagación del virus mortal. La región sur de Brasil concentra alrededor del 75% de la producción de pollo destinada a la exportación.
Lista actualizada
Los vetos comenzaron a ser anunciados el viernes, cuando el Ministerio confirmó el primer caso de influenza aviar de alta patogenicidad (IAAP) en una granja de Montenegro, municipio de Río Grande do Sul, estado del sur de Brasil fronterizo con Argentina y Uruguay y tercer mayor productor de pollo del país.
Según la lista actualizada, entre los países o bloques que suspendieron las compras de pollo procedentes de cualquier región de Brasil destacan China, la Unión Europea (UE), México, Irak, Corea del Sur, Chile, Sudáfrica, la Unión Euroasiática y Perú.
Igualmente figuran Canadá, República Dominicana, Uruguay, Malasia, Argentina, Timor Oriental, Marruecos, Bolivia, Sri Lanka, Pakistán, Filipinas y Jordania.
Por su parte, los países que suspendieron tan solo las importaciones procedentes del estado de Río Grande do Sul fueron Reino Unido, Baréin, Cuba, Macedonia del Norte, Montenegro, Kazajistán, Bosnia Herzegovina, Tayikistán y Ucrania.
Japón y Arabia Saudí tan solo suspendieron las importaciones procedentes del municipio de Montenegro.
Estos dos últimos países, así como Filipinas, son importantes importadores del pollo brasileño y reconocen el principio de regionalización previsto por la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA), que permite que se limite el veto a productos del municipio o la región afectada.
El Ministerio de Agricultura, por lo mismo, destacó la importancia de la regionalización para evitar pérdidas en regiones no afectadas por el virus, dado que Brasil, con dimensiones continentales y producción distribuida en varios estados, exportó más de 5 millones de toneladas de productos avícolas en 2024.
Según versiones de prensa, el Gobierno brasileño realiza intensas negociaciones para que China adopte este principio y permita la compra de pollo de regiones que no han sido afectadas por la enfermedad.
La suspensión de importaciones de mercados clave plantea desafíos para el sector avícola, especialmente en Río Grande do Sul, responsable por el 15% de la producción nacional y el estado más castigado por las fuertes lluvias y las inundaciones de marzo del año pasado.
Con información de Bloomberg y EFE