Bélgica y España arrestaron a 45 personas como parte de un operativo internacional entre las policías de siete países contra una red que traficaba cocaína de Latinoamérica a Europa, informaron agencias de la Unión Europea (UE) y fiscales.
El operativo desmanteló “una de las redes de tráfico de cocaína de habla albanesa más activas de Europa”, afirmaron Europol y Eurojust, añadiendo que se realizaron registros en más de 80 lugares.
En un comunicado conjunto, las agencias indicaron que los sospechosos llevaban cocaína de Latinoamérica a Europa.
“Más de 600 oficiales policiales, en estrecha cooperación con fiscales e investigadores, realizaron allanamientos contra miembros de esta red en España y Bélgica. También se realizaron acciones en Croacia, Alemania, Italia y Holanda”, indicaron.
En Bélgica, la fiscalía federal informó que la policía detuvo a 30 personas, realizando 49 registros en todo el país, la mayoría en Bruselas y sus alrededores y en Amberes. No se informó qué materiales fueron capturados en esa operación.
Bélgica se ha convertido en un punto importante de tránsito de drogas hacia Europa. Amberes, un puerto por donde pasan miles de contenedores cada día, es uno de los principales puntos de entrada de la cocaína.
La fiscalía de Bélgica dijo que la mayoría de los sospechosos viven en el distrito de Bruselas, y que la red traficante tenía puntos de depósito cerca del puerto de Amberes, donde llega la cocaína desde Sudamérica.
Los traficantes, añade, estaban conspirados con ciudadanos del sur de Europa que pertenecen a familias mafiosas de la provincia de Limburg.
Para meter la droga en Europa, la organización usaba aviones de carga, avionetas privadas o contenedores de barco enviados a los puertos de Amberes, Rotterdam en Holanda, Le Havre en Francia y Hamburgo en Alemania, según autoridades.
El año pasado, la policía belga arrestó a varias personas en un operativo sin precedente contra el crimen organizado, luego que los detectives lograron descifrar una red de comunicaciones usada por los criminales.
Según la fiscalía belga, los detectives lograron descifrar el servicio de mensajes Sky ECC y así identificar a sospechosos en Brasil, Ecuador, Colombia, Perú, Bolivia y Paraguay.