El gobernador Pedro Pierluisi anunció el lunes que el estatus político de Puerto Rico estará en la papeleta de las elecciones generales de noviembre y que, por primera vez, el actual estatus de la isla como territorio estadounidense no será una opción en el referéndum no vinculante.
Los votantes de la isla de 3,2 millones de habitantes elegirán entre la estadidad, la independencia o la independencia con libre asociación, cuyos términos se negociarían en relación con los asuntos exteriores, la ciudadanía estadounidense y el uso del dólar estadounidense.
“De esta forma se hacen valer nuestros derechos como ciudadanos americanos, de exigir nuestra autodeterminación por medio del voto directo y sin intermediarios, y de requerirle al gobierno federal la reparación del agravio que representa nuestro estatus colonial”, declaró Pierluisi.
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El gobernador, líder del Partido Nuevo Progresista —favorable a la estadidad—, activará una ley de 2020 que permite al actual gobernador convocar un referéndum sobre el estatus.
En 2022, la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó un proyecto de ley destinado a ayudar a Puerto Rico a avanzar hacia el cambio de su estatus territorial. La Ley de Estatus de Puerto Rico, promovida por el representante Raúl Grijalva, de Arizona, excluiría como opción el actual estatus territorial de la isla.
Ese estatus ha perdido apoyo desde que el gobierno federal estableció en 2016 una junta fiscal no elegida que tiene autoridad para anular los poderes políticos locales después de que la isla se declarara en bancarrota.
En setiembre de 2023, el senador estadounidense Roger Wicker reintrodujo el proyecto de ley con un nombre similar al de Grijalva, pero incluyendo el estatus territorial de Puerto Rico como opción. Dos meses después, el senador Martin Heinrich presentó un proyecto de ley similar.
En el último referéndum celebrado en noviembre de 2020, el 53% votó a favor de la estadidad y el 47% en contra, y solo la mitad de los votantes registrados participaron en las elecciones generales. El referéndum de noviembre sería la séptima vez que la isla vota para determinar su relación política con Estados Unidos.
“Puerto Rico tiene el derecho, y yo diría la obligación moral, de continuar ejerciendo presión, reiterando su derecho a la autodeterminación y exigiendo que el Congreso responda de forma satisfactoria a la voluntad de nuestro pueblo”, dijo Pierluisi en una declaración tras firmar la orden ejecutiva. “Por eso, cuantas veces haya que votar para acabar con la colonia, así lo debemos hacer”.
En junio, dos docenas de organizaciones a favor de la independencia y la soberanía intervinieron ante una sesión del Comité de Descolonización de las Naciones Unidas sobre Puerto Rico. El comité ha proclamado el derecho de Puerto Rico a la autodeterminación y la independencia en más de 40 ocasiones.
El gobernador dijo que la estadidad ayudaría a los residentes de Puerto Rico a recibir los mismos fondos y beneficios en Medicaid, Medicare, SNAP y seguro social suplementario. Los votantes de Puerto Rico no pueden votar en las elecciones presidenciales generales de Estados Unidos, pero pueden participar en las primarias presidenciales.
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