LaLiga ha emitido un comunicado en el que acusa a la Federación Española de Fútbol (RFEF) de “no importarle la salud de los jugadores” por recurrir la resolución del Consejo Superior de Deportes (CSD) de aplazar los partidos Villarreal-Alavés y Sevilla-Barcelona.
LaLiga decidió posponer ambos encuentros por los compromisos con selecciones de la Conmebol de varios jugadores del Sevilla, Barcelona y Villarreal que no llegarían con tiempo suficiente para disputar los compromisos fijados, inicialmente, para el próximo sábado.
Sin embargo, días después, el Comité de Competición de la Federación Española de Fútbol desestimó los aplazamientos por no considerar que se trataba de “una causa de fuerza mayor”.
Pero el Consejo Superior de Deportes optó por conceder la medida cautelar solicitada por el presidente de LaLiga, Javier Tebas, y aceptar el cambio de fecha de ambos enfrentamientos de la cuarta jornada. A continuación la RFEF ha anunciado que recurrirá la resolución del CSD al tiempo que le acusó de poner en riesgo la integridad de la competición.
Por ello, LaLiga ha vuelto a salir al paso del movimiento federativo y ha emitido un comunicado en el que subraya que el “CSD es competente para la adopción de la medida cautelar y la resolución es ajustada a derecho, contando con jurisprudencia que la respalda”.
Además, el organismo que preside Javier Tebas, puntualiza que el “fundamento de la medida cautelar es doble. Por una parte, el calendario de competición fue aprobado respetando los compromisos internacionales vigentes en ese momento, que han sido modificados de manera sobrevenida”.
LaLiga considera que “no existe perjuicio alguno para la RFEF, dado que la reprogramación de los partidos puede realizarse en fechas que no coincidan con partidos de las competiciones no profesionales que esta organiza”.
“Sorprende la postura de la RFEF, cuando hace escasamente un año se oponía a jugar partidos con un descanso inferior a 3 días en la vuelta a la competición tras el parón por COVID. Ahora quieren hacer jugar a los jugadores con menos incluso de cuarenta y ocho horas frente al anterior partido y tras un vuelo transoceánico y tres partidos disputados en menos de 10 días, llegando incluso a destino el mismo día del partido”, recuerda el comunicado.
LaLiga, además, acusa a la Federación de no importarle la salud de los jugadores. “Afecta de forma clara a la salud de los jugadores. Parece que en este caso a la RFEF no le importe la salud de los jugadores”, subraya.