A pocas cuadras del Capitolio de EE.UU., decenas de reporteros y algún que otro turista curioso recibieron sin sorpresa este martes la noticia de una nueva imputación contra el expresidente Donald Trump (2017-2021), esta vez por intentar revertir las elecciones de 2020.
En la calle, justo en frente del tribunal donde un gran jurado acusó formalmente al exmandatario, había aparcadas por lo menos unas diez minivans, coronadas con grandes antenas blancas, listas para transmitir los pases en vivo de decenas de reporteros nacionales e internacionales.
“Ya tenemos la acusación”, anunció uno de ellos a sus compañeros, minutos antes de que se conociera oficialmente el documento judicial, que acusa a Trump de conspiración para defraudar a EE.UU., conspiración para obstruir un procedimiento oficial, obstrucción e intento de obstruir un procedimiento oficial y conspiración contra derechos.
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Esta corte federal se ha convertido en los últimos meses en el epicentro de los casos contra el expresidente y contra cientos de sus seguidores, que irrumpieron en el Capitolio el 6 de enero de 2021, cuando se estaba llevando a cabo el proceso de certificación de los resultados electorales, que dieron la victoria al actual mandatario Joe Bien.
Varios turistas curiosos se acercaron, tomaron fotos y se sentaron en las escaleras que llevan hacia el tribunal, donde el fiscal especial Jack Smith anunció los cargos.
Vestido con una camisa de flores hawaianas, un gorro crema y gafas de sol, Peter, de 53 años, se frenó junto a su hijo de dos años frente a la corte y observó el despliegue de medios.
Vinieron de Alaska para conocer la capital, y decidieron acercarse por recomendación de un amigo que vive en la ciudad. “Ni he leído los cargos, tampoco sé muy bien de qué se trata, pero mi amigo me dijo que quizás veía cosas interesantes”, dijo el estadounidense a EFE.
“Yo solo espero que todo el mundo tenga que seguir las mismas reglas, que la ley sea igual para todos”, agregó.
Un hombre descalzo, vestido con una capa con textura aterciopelada roja y un celular en la mano se acercó también a los alrededores del tribunal gritando consignas en defensa de los seguidores de Trump que participaron en el asalto.
“Merecen justicia, idiotas”, gritó el hombre, quien también insultó directamente a un periodista de la cadena CBS, quien esperaba para entrar en una transmisión en vivo. Peter agarró de la mano a su hijo y rio: “Me encanta ver este circo”.
Fuente: EFE
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