
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó este viernes que Estados Unidos “posee y controla” el 10% de Intel, luego de que el fabricante de semiconductores “aceptó” ceder ese porcentaje de sus acciones al gobierno estadounidense.
Trump dijo que Intel tiene un “futuro aún más prometedor” y que negoció el acuerdo del 10% con el director ejecutivo de la compañía, Lip-Bu Tan.
“Dije ‘creo que deberían pagarnos el 10% de su empresa’”, afirmó Trump a periodistas sobre la reunión que mantuvo la semana pasada con CEO Lip-Bu Tan.
“Dije ‘creo que sería bueno tener a Estados Unidos como su socio’... han aceptado hacerlo, y creo que es un gran acuerdo para ellos”, agregó el presidente.
El mandatario estadounidense resaltó que el país “no pagó nada por estas acciones” y ahora están valoradas en aproximadamente US$ 11,000 millones.

El gobierno estadounidense pretendía obtener acciones de la empresa a cambio de subsidios ya planeados por el expresidente Joe Biden, según aclaró la semana pasada el secretario de Comercio Howard Lutnick.
Estos subsidios formaban parte de la Ley CHIPS, aprobada durante el mandato Biden y destinada a fomentar el establecimiento de toda la cadena de valor de chips y semiconductores en el país.
El presidente republicano busca atraer empresas a su país imponiendo aranceles a los productos importados.
“Deberíamos recibir capital a cambio de nuestro dinero”, declaró Lutnick en aquel momento. “Pagaremos el dinero comprometido por la administración de Joe Biden y recibiremos acciones a cambio”.
Sin embargo, una participación en Intel no implicaría derechos de voto ni un puesto en la junta directiva del grupo, especificó el secretario de Comercio.
Intel es una de las empresas más emblemáticas de Silicon Valley, pero su éxito se ha visto eclipsado por los gigantes asiáticos TSMC y Samsung, que dominan el mercado de semiconductores.
A principios de agosto, Trump atacó a Lip-Bu Tan, acusándolo de “enfrentar un grave conflicto de intereses” y exigiéndole su “dimisión inmediata”.
Posteriormente, lo recibió en la Casa Blanca el 11 de agosto, en una reunión que el presidente estadounidense calificó de “muy interesante”.
El gigante japonés de inversión tecnológica SoftBank Group también anunció la semana pasada su intención de invertir US$ 2,000 millones en Intel, lo que elevaría su participación al 2%.
Qué significa invertir en Intel
Con esta decisión, Trump estaría cerrando una de las intervenciones gubernamentales más grandes de Estados Unidos desde la intervención en la industria automotriz realizada en la crisis de 2008, cuyo rescate fue posteriormente liquidado en el mercado.
Intel fue pionera en semiconductores y ha quedado rezagada en la fabricación de los componentes electrónicos de escalas más reducidas, que alimentan las pujantes industrias de los teléfonos móviles y la inteligencia artificial (IA), superada con holgura por rivales como la taiwanesa TSMC, Samsung o Nvidia, entre otras.
Intel ya fue uno de los principales beneficiarios de la Ley de Chips, que contó con apoyo bipartidista dentro del mandato del presidente Joe Biden, pensada para devolver competitividad y hacer que EE.UU. recuperara el resuello en la carrera por la fabricación de semiconductores comerciales y militares.
Con información de AFP y EFE