
El presidente Donald Trump reconoció el miércoles que sus aranceles podrían resultar en menos productos y mayores precios en Estados Unidos, diciendo que quizás los niños estadounidenses “tendrán dos muñecas en lugar de 30 muñecas”, pero insistió en que China sufrirá más por su guerra comercial.
Durante una reunión del gabinete en la Casa Blanca, Trump se centró en el superávit comercial de China con Estados Unidos. Los chinos, dijo, están “teniendo tremendas dificultades porque sus fábricas no están haciendo negocios”, añadiendo que “mucho de eso no lo necesitamos”.
“Sabes, alguien dijo, ‘Oh, los estantes van a estar vacíos’”, continuó Trump, ofreciendo un hipotético. “Bueno, tal vez los niños tendrán dos muñecas en lugar de 30 muñecas. Así que tal vez las dos muñecas costarán un par de dólares más de lo que normalmente costarían”.
Los comentarios surgieron cuando se le preguntó al presidente si había hablado con el líder chino Xi Jinping sobre intentar encontrar una salida a la guerra comercial entre los dos países que ha sido provocada por varias rondas de aranceles de Trump. Trump no respondió a la pregunta.
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Los minoristas estadounidenses han estado advirtiendo que los aranceles de Trump sobre las importaciones de China podrían afectar significativamente la disponibilidad y el precio de algunos productos más adelante este año, incluidos disfraces para Halloween y muchos juguetes para Navidad. Las empresas estadounidenses dicen que no tienen suficiente tiempo para reubicar la fabricación antes de que los consumidores experimenten escasez y precios más altos.
Trump intentó culpar a su predecesor demócrata, Joe Biden, por los datos económicos mediocres.
El gobierno informó que la economía de Estados Unidos se contrajo a una tasa anual del 0.3% en los primeros tres meses del año debido a un aumento en las importaciones, ya que las empresas intentaron adelantarse a los amplios aranceles impuestos a casi todos los países, en productos como los automóviles, el acero y el aluminio. E incluso los signos positivos de un aumento en el consumo interno indicaron que las compras podrían estar produciéndose para adelantarse a los aumentos de precios que provocarán los impuestos a las importaciones.
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Trump culpó a Biden mientras el mercado de valores caía el miércoles por la mañana en respuesta al informe del producto interno bruto.
“Este es el mercado de valores de Biden, no el de Trump”, publicó en su red social el republicano, que asumió el cargo en enero. “Los aranceles pronto comenzarán a aplicarse, y las empresas están comenzando a mudarse a Estados Unidos en números récord. Nuestro país prosperará, pero tenemos que deshacernos de las secuelas de Biden. Esto tomará un tiempo, NO TIENE NADA QUE VER CON LOS ARANCELES”.
Pero el informe del PIB da elementos a los demócratas para afirmar que las políticas de Trump podrían empujar a la economía hacia una recesión.
“Trump ha estado en el cargo solo 100 días, y los costos, el caos y la corrupción ya están en aumento”, señaló el senador demócrata de Oregon, Jeff Merkley. “La economía se desacelera, los precios suben y las familias de clase media sienten la presión”.
Trump destacó aspectos positivos del informe del PIB
El informe llega mientras Trump intenta centrar la atención en nuevas inversiones corporativas en Estados Unidos al tiempo que celebra su 100mo día en el cargo. El mandatario planeaba hacer comentarios sobre el tema más tarde.
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El mensaje económico de Trump contiene algunos argumentos contradictorios y descarta datos que hacen sonar las alarmas.
Quiere que se le reconozca por unos agresivos primeros 100 días de regreso en la Casa Blanca que incluyeron despidos masivos de trabajadores federales y el inicio de una guerra comercial con nuevos aranceles de 145% contra China. También quiere culpar a Biden, quien dejó el cargo hace meses, por la respuesta negativa de los mercados financieros. Además, afirma que sus aranceles son herramientas de negociación para generar acuerdos comerciales, pero al mismo tiempo confía en que los cientos de miles de millones de dólares en ingresos arancelarios le ayuden a cubrir las reducciones de impuestos sobre la renta que planea.
Trump destacó el miércoles los aspectos positivos del informe del PIB en una reunión del gabinete. Pero esa reunión reveló inadvertidamente cómo su administración también trata de atribuirse el mérito de políticas relacionadas con la administración de Biden, ya que el secretario de Comercio, Howard Lutnick, habló sobre su reciente viaje a Arizona para ver las fábricas de chips de computadora de Taiwan Semiconductor Manufacturing Co (TSMC).

TSMC señala en su sitio web que, en mayo de 2020, durante la primera presidencia de Trump, cuando la pandemia de coronavirus perturbó la economía global, anunció planes para construir su primera planta en Arizona. Anunció una segunda fábrica en diciembre de 2022, cuando Biden estaba en el cargo. En 2024, después de obtener hasta 6.600 millones de dólares en compromisos de la ley bipartidista denominada CHIPS and Science Act, TSMC anunció planes para una tercera planta.
Trump desestimó la importancia del apoyo gubernamental que Biden hizo posible para que las fábricas de chips de computadora abrieran en el país.
“Están construyendo debido a los aranceles”, sostuvo Trump.
Cuando se le preguntó si sus aranceles provocan inflación, Trump declaró el martes, en una entrevista con ABC News, que la economía habría implosionado si no hubiera impuesto gravámenes a las importaciones de aliados como la Unión Europea, Canadá, México, Japón, Corea del Sur e India.
“Todo el mundo estará bien”, aseguró Trump.

Las declaraciones de los demócratas tras la divulgación del informe del PIB indican cuán rápidamente la economía, que aún tiene una saludable tasa de desempleo del 4,2%, parece perder impulso a pocas semanas del regreso de Trump.
“En solo 100 días, el presidente Trump ha llevado a la economía de Estados Unidos de un crecimiento fuerte y estable a un PIB negativo”, apuntó Heather Boushey, exmiembro del Consejo de Asesores Económicos de la Casa Blanca de Biden. “Este asombroso cambio de fortuna se debe directamente a la incoherencia de su política económica y a su mala gestión de la política federal en general”.
Pero el asesor comercial de la Casa Blanca, Peter Navarro, dijo a los periodistas que la caída del PIB fue un “caso aislado” debido al aumento de las importaciones, que matemáticamente restan de la medida de la actividad económica. Navarro aseguró que los recortes de impuestos sobre la renta individual y empresarial planeados por Trump contribuirían al crecimiento en los próximos meses.
“Todo lo que estamos viendo son noticias buenas y sólidas”, afirmó Navarro. “Así que la idea de que se avecina una recesión debería ser descartada tajantemente”.