La Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos debería empezar a reducir compras de activos después de su próxima reunión a principios de noviembre, aunque las tasas tendrán que esperar antes de subir, dijo Christopher Waller, uno de sus gobernadores.
“Creo que hemos avanzado lo suficiente (en el frente del empleo) para que la reducción en nuestras compras de activos comience después de la próxima reunión” el 2 y 3 de noviembre, subrayó.
Describió un “mercado laboral que ha experimentado una recuperación saludable, pero no está completamente curado”, durante su discurso en la Universidad de Stanford (California).
Waller cree, como indicó anteriormente el presidente de la Fed, Jerome Powell, que las compras de activos deberían reducirse a cero para mediados del 2022.
La tasa de reducción puede ralentizarse o acelerarse en función de la evolución de las condiciones económicas, precisó.
“No espero que la subida de tasas clave comience poco después del final de las compras de activos. Las dos acciones políticas son distintas”, anticipó.
En cuanto a la inflación, mayor y más persistente de lo esperado, sigue “pensando” que será “transitoria” y volverá a su meta “de 2% el próximo año”.
Otra gobernadora de la Fed, Michelle Bowman, recalcó el martes en un discurso separado que pasará tiempo antes de que “los efectos completos de la pandemia se hagan evidentes”.
“Incluso aquellos que están trabajando pueden tener menos oportunidades de cambiar de carrera, o sus trabajos y finanzas pueden ser demasiado precarios para tomarse el tiempo de mejorar su educación o competencias”, señaló.