Los senadores de Estados Unidos Marco Rubio y Bob Menéndez presentaron un proyecto de ley para restablecer un programa migratorio que favorece a médicos cubanos y también combatir la “trata” de estos profesionales a cargo del régimen castrista con lo que consideran “misiones humanitarias disfrazadas” en varios países.
La idea es restablecer un programa migratorio estadounidense para los médicos profesionales cubanos, suspendido bajo la Administración del presidente Barack Obama (2009-2017), destinado a aquellos que son elegibles y a sus familiares directos.
El demócrata Menéndez dijo que este proyecto bipartidista asegura que “Estados Unidos sea un refugio seguro para aquellos profesionales médicos cubanos que buscan amparo y protección del régimen”.
Agregó que los trabajadores de la salud de primera línea merecen la “admiración y gratitud”, especialmente a medida que la pandemia del COVID-19 “continúa azotando al mundo”.
Por otro lado, ambos senadores buscan también combatir la “trata” y explotación de médicos y enfermeros cubanos y fortalecer medidas para que el régimen cubano “rinda cuentas” sobre sus llamadas “misiones médicas” en otros países.
Los dos senadores cubanoestadounidenses señalaron que el régimen castrista y el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, tratan de disfrazar como misiones médicas unas “brigadas de trata de personas patrocinadas por el Estado”.
Estos programas oficiales que “aparentan ser motivadas por esfuerzos humanitarios y empáticos, son en realidad esquemas coercitivos de trata de personas del régimen que solo enganchan a profesionales médicos cubanos en servidumbre por contrato”, expresó Menéndez en un comunicado.
Los médicos, enfermeros y otros profesionales de la salud cubanos están sujetos a “condiciones de trabajo deplorables, confiscaciones de sus documentos legales y una compensación significativamente reducida”, indicó Rubio.
El republicano señaló que Estados Unidos tiene “un deber moral de combatir estos esquemas y hacer que los perpetradores de estos abusos rindan cuentas”.
La ley requiere informes sobre las condiciones de trabajo forzoso al que se enfrentan los doctores cubanos en países alrededor del mundo.
Las misiones médicas consisten en el envío de profesionales sanitarios a países que así lo solicitan al Gobierno cubano.
A lo largo de los años, más de 400,000 profesionales han cumplido misiones en 164 países de África, América, Oriente Medio y Asia.