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Estados Unidos podría experimentar una “tormenta perfecta” para que aumenten los casos de COVID-19 este año si los estadounidenses no se vacunan y, al mismo tiempo, aumentan la actividad social, según el Modelo de Presupuesto Penn Wharton.
Se estima que una cuarta parte de los estadounidenses optará por no vacunarse contra el coronavirus este año, dijo la organización de investigación no partidista en un informe.
Si las actividades que involucran contacto personal superan el 70% de los niveles previos a la pandemia, otras 4.6 millones de personas podrían contraer el virus este año.
“Si todos los residentes estadounidenses con derecho a vacunarse lo hacen en 2021, proyectamos que la pandemia terminará efectivamente para el otoño”, escribieron los investigadores Alex Arnon y John Ricco en el informe. “Las diferencias en la tasa de adopción de la vacuna conducen a grandes diferencias en el estado de la economía a fines del 2021”.
La vacunación universal significaría 8.3 millones de casos menos del virus este año y provocaría un auge económico según las proyecciones, con un crecimiento del PBI del cuarto trimestre 2 puntos porcentuales mayor y la creación de 2.6 millones de empleos adicionales para diciembre.
Conseguir que las personas se vacunen será un desafío difícil, ya que aproximadamente 30% de los encuestados dice que no lo hará, incluso cuando el presidente Joe Biden pretende que todos los estadounidenses tengan acceso a la vacuna a más tardar el 1 de mayo.
Esto representa un desafío para Biden, cuyos objetivos económicos se basan en la distribución de las vacunas y la reapertura de los negocios.
Las diferencias partidistas se ven cada vez más en la intención de vacunarse. Una encuesta del centro de investigación Pew, realizada entre el 16 y el 21 de febrero, reveló que los demócratas tienen 27 puntos porcentuales más de probabilidades que los republicanos de decir que planean vacunarse contra el coronavirus o ya lo hicieron.
Mientras tanto, las empresas están desesperadas por volver a niveles normales de actividad. Tres cuartas partes de las pequeñas empresas dicen que la pandemia ha tenido un efecto negativo moderado o grande en su actividad, según los últimos resultados de la encuesta semanal de la Oficina del Censo.