Casi la mitad de los hispanos que han estudiado una carrera científica en Estados Unidos se enfrentan a algún tipo de maltrato durante sus estudios, como por ejemplo ser tratados como si no entendieran el tema de conversación, según una investigación del Pew Research Center.
El 43% de los hispanos que trabajan en materias científicas o tecnológicas asegura haber sufrido alguno de estos tres tipos de maltrato durante su educación: ser tratados como si fueran incapaces de entender la clase, sentir que no merecen estar en la clase o recibir comentarios negativos sobre su raza o etnia.
Por contraposición, un 33% de trabajadores blancos en campos científicos asegura haber sufrido experiencias similares.
Es solo uno de los muchos hallazgos del estudio del Pew Research Center sobre las actitudes y la confianza en la ciencia de los hispanos que viven en Estados Unidos, basado en encuestas a más de 14,000 estadounidenses, 3,700 de ellos de origen hispano.
El estudio recoge también que la gran mayoría de trabajadores con raíces hispanas en campos STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas, en inglés) han tenido experiencias positivas durante sus estudios.
Los investigadores encontraron que la mayoría de hispanos -seis de cada diez- creen que no hay suficientes científicos de su misma etnia en posiciones relevantes, pero que si los hubiera, habría muchos más jóvenes latinos interesados en estudiar carreras STEM.
En este sentido, apenas el 26% de los hispanos entrevistados considera que son bienvenidos en carreras científicas, mientras que casi el 30% cree que no son nada bienvenidos por este tipo de profesionales.
Las opiniones de los estadounidenses de origen hispano respecto a la medicina son algo mejores, pero denotan igualmente una diferencia de trato respecto a la gente blanca.
Uno de los datos más relevantes de la publicación es que más de la mitad de los estadounidenses hispanos, y en especial los inmigrantes de primera generación, consideran que el abuso por parte de investigadores médicos es un gran problema en el país.
Entre estos, el grupo que más preocupación muestra con respecto a la mala praxis médica -referida a casos como la esterilización forzada o los experimentos hechos sin informar a los participantes- son los hispanos que se identifican como negros, si bien este grupo es muy reducido dentro del grupo de los hispanos, ya que apenas comprende al 3% de estos.
También destaca el hecho de que casi la mitad de los hispanos que lleva diez años o menos en Estados Unidos no han ido al médico en el último año, una cifra mucho menor en el caso de los que llevan más de 20 años en el país.
Esto puede estar relacionado con el hecho de que cerca de la mitad de latinos cree que es complicado acceder a la Sanidad en Estados Unidos, si bien la otra mitad considera que es sencillo, números muy similares a los registrados entre los blancos y los negros.
La confianza en los profesionales sanitarios de los hispanos es generalmente alta, aunque, al igual que sucede con el resto de grupos étnicos, se ha visto mermada durante la pandemia.
Finalmente, respecto al COVID-19, la mayoría de estadounidenses de origen hispano -un 74%- considera que puede confiar en los consejos de los expertos médicos sobre la enfermedad.