
El gobierno del presidente estadounidense Donald Trump anunció este lunes “asistencia de viaje” y el pago de US$ 1,000 a los migrantes que usen una aplicación gubernamental para “autodeportarse”.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) informó que los migrantes que se autodeporten utilizando la aplicación CBP Home recibirán el subsidio una vez que se verifique que regresaron a su país de origen. Las autoridades calificaron el programa como una alternativa más eficiente a los costosos arrestos y deportaciones.
Desde que comenzó su segundo mandato en enero, el magnate republicano tomó medidas drásticas para frenar la migración e impulsó una campaña que alienta a los extranjeros en situación irregular a “autodeportarse”.
El DHS lanzó la aplicación móvil CBP Home para que comuniquen al gobierno su intención de irse del país.
En un comunicado el DHS califica de “oportunidad histórica” la posibilidad de que los extranjeros “reciban asistencia financiera y de viaje para facilitar su regreso a su país de origen a través de la aplicación CBP Home”.
Concretamente recibirán US$ 1,000 “una vez confirmado su regreso a su país de origen a través de la aplicación”.
El gobierno calcula que el uso de la aplicación “reducirá los costos de una deportación en aproximadamente un 70%”, incluso con el pago de la ayuda.
Actualmente, el costo promedio de arrestar, mantener en detención y expulsar a un extranjero en situación irregular “es de US$ 17,121”, según la administración.
Según el DHS, un hondureño ya utilizó el programa “para obtener un billete de avión de Chicago a Honduras”.
“Si se encuentra aquí indocumentado, la autodeportación es la mejor manera, la más segura y la más rentable de salir de Estados Unidos y evitar ser arrestado”, afirma la secretaria de Seguridad Interior, Kristi Noem, citada en el comunicado.
En una reunión de gabinete en abril, Noem mencionó la cifra de “20, 21 millones de personas que tienen que volver a casa”.
Según datos oficiales, en 2022 vivían 11 millones de migrantes en situación irregular o con estatus temporal en Estados Unidos.
El gobierno de Trump considera criminales a todos los migrantes que han entrado sin visa ni permiso, y también a algunos de los que abrieron expedientes de solicitud de asilo durante el mandato del expresidente demócrata Joe Biden.
Según datos gubernamentales, las autoridades han detenido a más de 168,000 migrantes en 2025, incluidos más de 600 presuntos miembros de la banda venezolana Tren de Aragua, que Trump ha declarado organización “terrorista” global.
Washington ha deportado a casi 300 personas a las que acusa de ser pandilleros del Tren de Aragua y de la pandilla MS-13 a la prisión del Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT) en El Salvador, que se prestó a recluirlos al cambio del pago de seis millones de dólares, según la Casa Blanca.
Algunos abogados de los deportados niegan que sus clientes sean pandilleros. Aseguran que han sido detenidos solo por sus tatuajes.
Varias asociaciones de defensa de los derechos civiles también denuncian la expulsión de migrantes sin la garantía de un debido proceso.
¿Nuevo plan?
La iniciativa marca un cambio en la forma en que el Departamento de Seguridad Nacional maneja las deportaciones, que comenzaron este año con una campaña publicitaria en las redes sociales y en la televisión que ordenaba a los migrantes regresar a sus países o se arriesgaban a ser deportados y no poder ingresar nunca más a Estados Unidos.
Bajo la presidencia de Joe Biden, la aplicación original CBP One se utilizaba para programar entrevistas de asilo. Ahora, en el segundo mandato de Trump, se ha utilizado para alentar a los migrantes a abandonar el país por su cuenta.
Según estimaciones del Departamento de Seguridad Nacional, incluso con el nuevo pago, el programa reducirá los costos de deportación en aproximadamente un 70%. La agencia estima que las medidas tradicionales de control migratorio —que incluyen la detención, el encarcelamiento y la expulsión— cuestan a los contribuyentes aproximadamente US$$ 17,000 por persona.
El Departamento señaló que el programa ya se ha implementado con éxito, y que un migrante recibió recientemente un vuelo de Chicago a Honduras. Se han programado viajes adicionales para esta semana y la próxima.
La puesta en marcha se produce después de que las deportaciones no hayan cumplido los objetivos del gobierno tras una serie de redadas de gran repercusión. En lo que va del año, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas ha detenido a 66,000 personas y ha deportado a unas 65,600, según los datos más recientes.
La administración también ha tomado medidas para restringir las vías de inmigración legal, suspendiendo algunas solicitudes de tarjetas de residencia y negándose a renovar el Estatus de Protección Temporal para haitianos y venezolanos, aunque los tribunales han bloqueado temporalmente esa iniciativa. Mientras tanto, los cruces en la frontera sur se han reducido a unos 7,000, la cifra más baja en décadas.
Con información de Bloomberg y AFP