La única integrante de la Reserva Federal (Fed) que se opuso al fuerte aumento de los tipos interés de Estados Unidos, la presidenta de la Reserva Federal de Kansas City, Esther George, dijo que disintió porque ese paso “añadiría incertidumbre” e inquietud a familias y empresas.
George ha sido una firme defensora del alza de la tasa de referencia para frenar la inflación más galopante de Estados Unidos en más de 40 años.
Empero fue la única integrante con derecho a voto que se opuso al alza de tres cuartos de punto anunciada el miércoles y prefería un aumento de medio punto.
“Con alta inflación y una economía ajustada, los argumentos para seguir eliminando la política acomodaticia son claros. No obstante, la velocidad para ajustar la política de tasas es importante”, dijo en un comunicado.
La decisión de esta semana, el primer aumento de 75 puntos básicos desde noviembre de 1994, se produjo cuando la Fed comienza a reducir la enorme reserva de activos acumulada durante la pandemia.
“Consideré que esa medida se sumaba a la incertidumbre política. Los cambios significativos y abruptos pueden ser perturbadores para los hogares y las pequeñas empresas mientras hacen los ajustes necesarios”, señaló.
Antes de la reunión de política monetaria de esta semana, los miembros de la Fed habían anunciado su intención de subir los tipos de interés en 50 puntos básicos, pero el sorprendente resurgimiento de la inflación en mayo cambió su cálculo.
Esta postura agresiva del banco central estadounidense despertó el temor de que la mayor economía del mundo enfrente una recesión en su esfuerzo por frenar el aumento de los precios, exacerbado por la invasión rusa de Ucrania y los actuales confinamientos por el COVID en China.
Alzas de 50 puntos básicos
Por su parte, el presidente de la Reserva Federal de Mineápolis, Neel Kashkari, dijo que apoya el alza de las tasas de interés de 75 puntos básicos de esta semana y que podría apoyar otra similar en julio, pero destacó que la Fed debería ser “cautelosa” a la hora de hacer demasiado y demasiado rápido.
“Una estrategia prudente podría ser, después de la reunión de julio, simplemente continuar con las alzas de 50 puntos básicos hasta que la inflación esté bien encaminada hacia el 2%”, afirmó en un ensayo publicado el viernes en el sitio web del banco.
“Adoptar un enfoque constante para hacer subir las tasas reales a largo plazo podría ayudarnos a evitar endurecer más de lo necesario para restablecer la estabilidad de los precios, asegurando al mismo tiempo que hacemos lo suficiente”, agregó.