Las expectativas de inflación a largo plazo en Estados Unidos continuaron disminuyendo en setiembre, lo que ayudó a elevar levemente la confianza de los consumidores con respecto al mes anterior a pesar de la creciente incertidumbre económica.
Los consumidores esperan que los precios suban a una tasa anual del 2.7% durante los próximos cinco a 10 años, el nivel más bajo desde abril del 2021, según la lectura final de setiembre de la Universidad de Michigan. La cifra inicial para el mes era de 2.8%.
Los encuestados estiman que los costos aumentarán un 4.7% durante el próximo año, un poco más que a principios de mes, pero aún cerca del nivel más bajo en un año, según mostraron los datos del viernes.
Sin embargo, la incertidumbre sobre las perspectivas de los precios a corto plazo alcanzó un máximo de cuatro décadas, dado que los precios de la energía están cayendo, pero los de los alimentos están aumentando.
”Es probable que las expectativas de inflación se mantengan relativamente inestables en los próximos meses, ya que es poco probable que esta incertidumbre disminuya ante las continuas presiones globales sobre la inflación”, dijo en un comunicado Joanne Hsu, directora de la encuesta.
El índice final de confianza de la universidad aumentó de 58.2 en agosto a 58.6. La estimación mediana en una encuesta de Bloomberg a economistas apuntaba a una lectura de 59.5.
Un indicador de las condiciones actuales se elevó a 59.7, el más alto desde mayo. El indicador de expectativas futuras de la encuesta se mantuvo sin variación en 58.
Un índice de condiciones de compra de bienes duraderos mejoró en setiembre, pero aún se mantiene cerca de un mínimo histórico.
Un informe publicado más temprano el viernes mostró que el gasto ajustado a la inflación de Estados Unidos registró una leve alza en agosto, mientras que un indicador clave de precios se aceleró más de lo previsto, lo que pone de relieve la resiliencia de los consumidores.