El Gobierno de Estados Unidos insistió en que las clases presenciales deben reanudarse en los colegios tras las vacaciones de Navidad, pese a la multiplicación de los casos de ómicron y la resistencia de los profesores en Chicago.
El coordinador del equipo de respuesta de la Casa Blanca a la pandemia, Jeff Zients, afirmó que el presidente estadounidense, Joe Biden, “no ha podido ser más claro” sobre que las escuelas del país deben permanecer abiertas.
En ese sentido, recordó que la Administración federal ha destinado US$ 130,000 millones dentro del plan de estímulo a fondos para que las escuelas apliquen medidas de prevención del COVID-19, como ventilación y distancia social, así como US$ 10,000 millones para que se practiquen pruebas de la enfermedad en los centros educativos.
“En marzo pasado, pusimos a los profesores y el personal de los colegios delante de la fila de adultos en ser vacunados. La mayoría de los profesores están inmunizados y ahora pueden acceder a las dosis de refuerzo”, indicó el responsable.
Zients reiteró que los niños de cinco años en adelante pueden recibir la vacuna contra el COVID-19 en Estados Unidos.
“Tenemos las herramientas”
“Tenemos las herramientas, sabemos cómo mantener a los niños seguros en el colegio, cerca del 96% de las escuelas están abiertas, los padres quieren que estén abiertas y los expertos son claros en que la educación presencial es la mejor para los niños tanto física como mentalmente”, subrayó.
Zients hizo este alegato a favor de la educación presencial después de que las clases fueran suspendidas este miércoles en Chicago (Illinois) tras la decisión del sindicato de profesores de la ciudad de regresar a la enseñanza “online” ante el aumento de casos.
El martes, casi el 88% de los delegados en el Sindicato de Profesores de Chicago y el 70% de sus miembros votaron por volver a la educación a distancia.
“Esta decisión se ha tomado con gran pesar y exclusivamente para la seguridad de los estudiantes y la comunidad”, explicó el sindicato en un comunicado, donde también acusó a la alcaldesa de Chicago, la demócrata Lori Lightfoot, de no adoptar “garantías de seguridad”.
En ese sentido, los profesores remarcaron que es su deseo regresar a las aulas, pero “lamentablemente la alcaldesa y su equipo directivo en las escuelas públicas de Chicago han puesto en peligro la seguridad y vitalidad de los estudiantes y educadores”.
Pese a que Estados Unido sestá registrando números récord de COVID-19, con más de un millón de nuevos casos aupados por la variante ómicron tan solo el lunes, la mayor parte de los distritos escolares han reanudado las clases presenciales tras las vacaciones de Navidad.
De acuerdo a datos del diario The Washington Post, la mayoría de los colegios en Estados Unidos volvieron a la educación presencial el lunes o pretenden hacerlo a lo largo de esta semana, aunque hay excepciones en Cleveland (Ohio), Atlanta (Georgia) o Newark (Nueva Jersey).
Nueva York retomó las clases presenciales
El mayor distrito escolar de Estados Unidos, el de la ciudad de Nueva York, retomó las clases en la escuela este lunes, con una visita del alcalde Eric Adams a un colegio de primaria en el Bronx.
Los contagios se han disparado en el país con la expansión de ómicron, que supone ya el 95% de los casos en Estados Unidos.
Según datos proporcionados este miércoles por los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés), la media de casos de COVID-19 al día en la última semana ha sido de 491,700 contagios, un incremento del 98% respecto a la semana previa.
En cuanto a los ingresos hospitalarios, el promedio de los últimos siete días fue de 14,800 diarios, lo que supone un aumento de 63% frente a la semana anterior, mientras que hubo una media de 1,200 fallecimientos al día (un incremento de 5%).
El principal epidemiólogo de la Casa Blanca, Anthony Fauci, afirmó este miércoles en la rueda de prensa del equipo de respuesta del Gobierno a la pandemia que es “inevitable” que más niños acaben en el hospital ante el incremento de los casos.
“Parece que ómicron causa una enfermedad menos grave pero el volumen agudo de infecciones debido a su profunda contagiosidad significa que más niños acabará infectados”, apuntó Fauci.
El asesor médico del presidente estadounidense, Joe Biden, destacó que posiblemente los menores de edad con “otras enfermedades subyacentes” sean los que acaben en el hospital. “Esto es algo inevitable”, indicó.
Adultos inmunizados para proteger a los más pequeños
En ese sentido, remarcó que la mejor manera de impedir que se contagien los niños que no estén vacunados debido a su edad es que las personas de su entorno sí estén inmunizadas.
“Cuando estén fuera, si son suficientemente mayores para tolerar una máscara facial, póngales una mascarilla, especialmente en lugares donde se congregue la gente”, apuntó el experto.
En Estados Unidos, las autoridades han autorizado la vacunación de los menores de entre 5 y 17 años.
Además, la Administración de Alimentos y Fármacos (FDA, en inglés) de Estados Unidos ha recomendado que se administre la dosis de refuerzo de la vacuna de Pfizer a los menores que sean inmunodeprimidos.
Este miércoles, un comité científico de los CDC está evaluando si aconsejar que todos los menores de entre 12 y 15 años reciban la dosis de refuerzo después que la FDA diera la luz verde el lunes.
Respecto a la posible vacunación de los menores de cinco años, Fauci señaló que probablemente las autoridades tengan datos sobre la inmunización a este grupo de edad en la primera mitad del 2022.
“Con suerte, hacia la primera mitad (de año) es posible que tengamos algo de información para poder vacunar a los niños de esas edades”, auguró.