Tomar cannabidiol -el componente no intoxicante del cannabis más conocido como CBD- puede reducir a la mitad la gravedad de los síntomas de ansiedad crónica en los jóvenes, según un nuevo estudio.
Los adolescentes y adultos jóvenes con ansiedad resistente al tratamiento que recibieron una sola píldora diaria de CBD durante 12 semanas informaron que sus síntomas se redujeron en un promedio de 43%, según determinó la organización australiana de salud mental juvenil Orygen en un estudio piloto.
Los resultados entre los 31 pacientes fueron notables, dijo Paul Amminger, investigador en Orygen y profesor de salud mental juvenil en la Universidad de Melbourne, quien dirigió el estudio.
“Los jóvenes tenían menos ataques de pánico y podían hacer cosas que antes no podían hacer, como salir de casa, ir a la escuela, participar en situaciones sociales, comer en restaurantes, tomar el transporte público o asistir a citas por sí mismos”, dijo.
El CBD proviene de la planta Cannabis sativa, pero no contiene THC, el ingrediente que droga a los consumidores de marihuana. La demanda ha creado una industria multimillonaria en los últimos años, con consumidores tomando versiones de venta libre con la esperanza de mejorar el sueño, tratar el dolor crónico y aliviar una serie de otras dolencias.
Los investigadores de Orygen comenzaron a estudiarlo en niños después de que un trabajo anterior sugiriera un beneficio en adultos.
La píldora fue bien tolerada, con una leve sedación y fatiga como los efectos secundarios más comunes, dijo Amminger. Los participantes de 12 a 25 años recibieron una dosis inicial de una cápsula de 200 miligramos por día, que se duplicó después de una semana.
Aquellos que no mostraron una mejora significativa aumentaron su dosis hasta 800 mg por día. A todos se les ofrecieron sesiones quincenales de terapia cognitiva conductual, aunque no habían respondido a la terapia anterior.
La mejora fue aún mayor cuando los investigadores analizaron las calificaciones de los médicos, que mostraron una disminución del 51% en los síntomas. Aún así, los hallazgos deben confirmarse con estudios más grandes y más largos, dijeron.
“El cannabidiol es una opción de tratamiento prometedora que parece segura y eficaz”, dijo Patrick McGorry, coinvestigador del estudio y director ejecutivo de Orygen. “Necesitamos más investigación para confirmar esto y explorar su valor”.