En una entrevista concedida el lunes a Reuters, Barkin, actual miembro con derecho a voto del comité que fija las políticas de la Fed, se mostró de acuerdo en que el país está avanzando hacia el nivel de progreso del mercado laboral que la Fed ha dicho que quiere antes de reducir las compras mensuales y, eventualmente, poner fin al programa. (Foto: AFP)
En una entrevista concedida el lunes a Reuters, Barkin, actual miembro con derecho a voto del comité que fija las políticas de la Fed, se mostró de acuerdo en que el país está avanzando hacia el nivel de progreso del mercado laboral que la Fed ha dicho que quiere antes de reducir las compras mensuales y, eventualmente, poner fin al programa. (Foto: AFP)

El presidente de la (Fed) de Richmond, , afirmó que es posible que el mercado laboral estadounidense se recupere lo suficiente como para que el banco central empiece a reducir su apoyo a la economía de la época de la crisis.

Barkin ha añadido una voz moderada al debate abierto sobre cuándo recortar los US$ 120,000 millones en compras mensuales de bonos del banco central.

Varios de los pares de Barkin han argumentado que las compras deberían eliminarse rápidamente para situar la política monetaria en una base más normal, prepararse para eventuales aumentos de las tasas de interés como protección contra la inflación, y moderar el alza de los precios de la vivienda y de otros activos que pueden verse impulsados por la compra de bonos de la Fed.

En una entrevista concedida el lunes a Reuters, Barkin, actual miembro con derecho a voto del comité que fija las políticas de la Fed, se mostró de acuerdo en que el país está avanzando hacia el nivel de progreso del mercado laboral que la Fed ha dicho que quiere antes de reducir las compras mensuales y, eventualmente, poner fin al programa.

“Nos estamos acercando... No sé exactamente cuándo será. Cuando nos acerquemos a ello, soy partidario de reducir las compras y volver a un entorno normal tan pronto como la economía nos lo permita”, manifestó Barkin.

Pero añadió que no estaba dispuesto a comprometerse con un calendario, argumentando que la Fed debería atenerse a lo que ha prometido: comprar bonos hasta que el mercado laboral se haya recuperado más plenamente.

Es creíble pensar que “llegaremos en los próximos meses”, señaló Barkin, que habló en medio de un debate en la Fed en el que algunos de sus colegas piden que se reduzcan las compras de bonos quizá ya en octubre.

“Me gustaría estar en un nivel normal de participación en los mercados de activos y un nivel normal de tasas (de interés)”, indicó. Pero “también creo que, como comité, cuando presentas una guía, la piensas cuidadosamente y luego haces todo lo posible para avanzar en línea con ella”.

Inflación persiste

En diciembre, la Fed dijo que esperaría “un progreso sustancial adicional” en la recuperación del empleo antes de reducir sus compras de activos, un precursor de alzas de las tasas de interés.

Si bien desde entonces algunos gobernadores han expresado preocupaciones sobre la estabilidad financiera o la necesidad de prepararse para subidas de tipos ante situaciones como, por ejemplo, una caída inesperada del mercado de bonos, Barkin dijo que seguía enfocado en el empleo y no en el calendario.

En particular, quiere que la relación empleo-población aumente quizás otro medio punto porcentual a alrededor del 59%, un punto de referencia que considera un umbral “holístico” de la salud del mercado laboral. Eso podría lograrse en poco tiempo o llevar meses en aumentar.

Los comentarios de Barkin representan un término medio que podría ayudar a dar forma a cualquier consenso que surja sobre los próximos pasos de la Fed. También muestran las opiniones divergentes que surgen entre los funcionarios de la Fed sobre qué datos merecen énfasis mientras planean su salida de las políticas monetarias de emergencia establecidas al comienzo de la pandemia.

Un anticipado reporte emitido el miércoles por el Gobierno indicó que las alzas de los precios al consumidor se desaceleraron en julio, pero la inflación en general se mantuvo históricamente alta, en medio de continuas interrupciones en la cadena de suministro y una mayor demanda de servicios vinculados a viajes a medida que la actividad económica se recupera.

El índice de precios al consumidor (IPC) de Estados Unidos aumentó 0.5% el mes pasado después de subir 0.9% en junio, según un reporte el Departamento de Trabajo.