Análisis de laboratorio de la terapia de COVID-19 basada en anticuerpos de GlaxoSmithKline (GSK) que se están desarrollando con el socio estadounidense Vir han indicado que el fármaco es eficaz contra la nueva variante de ómicron, informó la farmacéutica británica.
Una declaración de GSK dijo que las pruebas de laboratorio y un estudio en hámsteres han demostrado que el cóctel de anticuerpos sotrovimab funciona contra virus que fueron diseñados biológicamente para llevar una serie de mutaciones distintivas de la variante ómicron.
Las pruebas continúan confirmando los resultados contra todas las mutaciones de ómicron, y se espera una actualización para fin de año, agregó.
El anticuerpo está diseñado para adherirse a la proteína de pico en la superficie del coronavirus, pero se ha descubierto que ómicron tiene una cantidad inusualmente alta de mutaciones en esa proteína.
“Sotrovimab fue diseñado deliberadamente con un virus mutante en mente”, señaló el presidente ejecutivo de Vir, George Scangos, y agregó que el fármaco se dirigía a una región de la proteína de pico que era muy poco probable que mutara.
Por otra parte, el regulador de medicamentos de Gran Bretaña aprobó el jueves el sotrovimab, también conocido bajo la marca Xevudy, para personas con COVID-19 leve a moderado y que tienen un alto riesgo de desarrollar una enfermedad grave.
La Agencia Reguladora de Medicamentos y Productos Sanitarios (MHRA) recomendó el uso de Xevudy lo antes posible y dentro de los cinco días posteriores al inicio de los síntomas.
Sotrovimab se basa en anticuerpos monoclonales, que son versiones fabricadas en laboratorio de los anticuerpos naturales que genera el cuerpo para combatir una infección. Eli Lilly, Regeneron y AstraZeneca ofrecen o están desarrollando productos similares.
Regeneron informó el martes que las pruebas de laboratorio y el modelado por computadora sugieren que los medicamentos de anticuerpos COVID-19, incluido el de Regeneron, habrían reducido la eficacia contra la variante ómicron.