Un equipo de investigadores españoles ha logrado identificar una serie de mutaciones genéticas que están asociadas a una mayor gravedad del COVID-19 entre los varones, y especialmente entre los mayores de 60 años.
Los investigadores han demostrado que existen una serie de variantes genéticas que influyen sobre la evolución del COVID-19 en hombres y mujeres y han identificado una serie de mutaciones asociadas a una mayor gravedad de la enfermedad en varones.
El estudio, que puede facilitar la comprensión de posibles complicaciones asociadas a esta enfermedad, se enmarca en el proyecto internacional Scourge, en el que participan instituciones de España y América Latina, y este estudio se ha centrado en pacientes de 34 hospitales españoles reclutados entre marzo y diciembre del 2020.
Los autores, pertenecientes a varios centros de investigación biomédica en red (CIBER) del Instituto de Salud Carlos III, han estudiado durante dos años el genoma de 11,939 casos de COVID de toda España con una amplia información clínica de las personas afectadas.
Este estudio también ha incluido muestras y datos clínicos recogidos en el proyecto Stop Coronavirus, también financiado por el Fondo COVID-19 del Instituto de Salud Carlos III y liderado por José María Aguado, del Hospital 12 de Octubre de Madrid, en el que también han participado otros hospitales españoles, y los resultados se han publicado en la revista Human Molecular Genetics.
Tras realizar estudios de asociación de marcadores genómicos en función del sexo en personas hospitalizadas, los autores han identificado variantes en varios genes (TLR7 e IFN, entre otros) que confirman su papel en la evolución de la enfermedad, ha informado el Instituto de Salud Carlos III en una nota difundida hoy.
Por ejemplo, determinadas mutaciones ligadas al cromosoma X (en el gen TLR7) son causa de un tipo de COVID-19 asociada a una alta mortalidad que solo afecta a los hombres.
Investigadores del Instituto de Salud Carlos III han publicado además los resultados de otro estudio, que se enmarca en el proyecto Ciberes-UCI-COVID para profundizar en el conocimiento de los efectos del uso de corticoides en pacientes afectados por COVID-19 e ingresados en la unidad de cuidados intensivos.
Los científicos han buscado en este caso variables que puedan guiar mejor un tratamiento personalizado con estos medicamentos, y han comprobado que los corticosteroides son efectivos para mejorar la supervivencia, pero deben administrarse en función de la edad, la gravedad, la inflamación basal y la ventilación mecánica invasiva.
Han alertado de la especial relevancia que tiene el hallazgo en el que los investigadores han evidenciado que el uso precoz de esteroides -siete días o menos desde el inicio de los síntomas- puede resultar perjudicial para los pacientes.
Estos resultados se basan en el análisis, entre febrero del 2020 y octubre del 2021, de 4,226 pacientes ingresados en 55 UCI españolas, la mayoría de los cuales (el 85%) fue tratado con corticosteroides durante la hospitalización.
Los resultados se han publicado en la revista Intensive Care Medicine y concluyen que los corticoides fueron, de manera global, efectivos para reducir la mortalidad a 90 días y la mortalidad intrahospitalaria, y que el nivel de eficacia del uso de los esteroides variaba en función de los factores estudiados, por lo que han sugerido la importancia de personalizar el uso de este tipo de fármacos.