El regulador de valores de China propuso un endurecimiento de las normas que rigen la cotización de las empresas chinas en el extranjero, algo que, según dijo, mejorará la supervisión y posibilitará que las empresas sigan haciéndolo.
La Comisión Reguladora de Valores de China (CSRC, por sus siglas en inglés) dijo en su sitio web que propone establecer un nuevo marco para la cotización de las empresas chinas en el extranjero.
Las ofertas públicas iniciales (OPI) en el extranjero han supuesto una fuente alternativa de capital para las empresas chinas en el pasado y la cotización en Nueva York ha sido considerada como una insignia de honor para muchas.
Pekín ha estado estudiando la posibilidad de aumentar la supervisión de las salidas a bolsa en el extranjero desde la OPI de US$ 4,400 millones del gigante del transporte compartido Didi Global Inc. y las propuestas del viernes no fueron tan estrictas como algunos esperaban.
Las empresas chinas han recaudado unos US$ 12,800 millones en salidas a bolsa en Estados Unidos en el 2021, según datos de Refinitiv, pero las operaciones se paralizaron tras el debut de Didi en Nueva York a principios de julio.
Según el proyecto de normas, las empresas chinas con las llamadas estructuras de entidades de interés variable (VIE, por sus siglas en inglés) pueden cotizar en el extranjero, siempre que cumplan los requisitos de cumplimiento.
Las empresas chinas que cotizan en mercados bursátiles extranjeros, principalmente en Estados Unidos, usan sobre todo las VIE para eludir las normas chinas que restringen la inversión en el extranjero en sectores sensibles como los medios de comunicación y las telecomunicaciones.
Esta vía ofrece más flexibilidad a las empresas para captar capital en el extranjero, al tiempo que evitan el escrutinio y el largo proceso de investigación de las OPI que tienen que pasar las empresas constituidas localmente.