El candidato presidencial conservador de Chile, José Antonio Kast, criticado sobre todo por su postura sobre temas de la mujer y el medio ambiente, está cambiando su tono para atraer al electorado moderado de cara a la segunda vuelta del 19 de diciembre.
Kast se comprometió a intensificar la lucha contra el calentamiento global, destacando una sequía que se ha prolongado por una década como uno de los principales desafíos que enfrenta el Gobierno, y exigió que se defiendan los derechos de las mujeres en todos los ámbitos de la vida.
Fue un estilo marcadamente diferente a su manifiesto original, que había abierto la puerta a más centrales eléctricas a carbón y había planteado la posibilidad de cambiar el nombre del Ministerio de la Mujer a Ministerio de la Familia.
Kast es miembro del movimiento católico de Schoenstatt y se opone al matrimonio homosexual y al aborto bajo cualquier causal, incluso en el caso de violación.
Kast también moderó sus propuestas tributarias. Si bien todavía respalda la reducción de la tasa de impuestos corporativos, ahora sería más gradual, llevando la tasa al promedio de la OCDE de 25% en primer lugar. Anteriormente había dicho que quería que la tasa disminuyera de 27% a 17%. También existe una propuesta para utilizar el impuesto al valor agregado para financiar el ahorro previsional.
En cuanto a los puntos claves de su programa, “el primero es recuperar la paz y el orden. El segundo, recuperar la economía”, dijo Kast. Los otros tres temas principales son la “vida digna”, el cambio climático y la mujer, dijo, sin dar muchos detalles.
No obstante, si bien cambió su manifiesto, Kast también defendió la primera versión: “Muchos criticaron nuestro programa de Gobierno de primera vuelta, pero recogió lo esencial de lo que veíamos como urgencias sociales, que explica el apoyo que tuvimos en primera vuelta”.
Kast reiteró su ataque al Partido Comunista, que tiene una alianza con el candidato rival, Gabriel Boric, quien actualmente está a la cabeza en las encuestas. El diputado y exlíder estudiantil también está moderando sus propuestas de cara a las elecciones, incorporando nuevos asesores económicos y llamando al diálogo.
“Es muy difícil que un partido como el PC [Partido Comunista] defienda la democracia”, dijo Kast.