Arabia Saudita transfirió el jueves un nuevo tramo de acciones del gigante petrolero saudita Aramco, que representa 8% del capital, a empresas propiedad del fondo soberano del país.
El príncipe heredero saudita, Mohamed Bin Salman, “anunció la finalización de la transferencia del 8% del total de acciones emitidas por Aramco de la propiedad del Estado a empresas propiedad al 100% del Fondo de Inversión Pública (PIF)”, dijo la agencia de prensa oficial SPA, precisando que la parte del Estado ascenderá al 82,186%, frente al 16% del PIF.
La monarquía petrolera había transferido a su fondo soberano un primer tramo de acciones en 2022, del 4%, seguido de una segunda transferencia el año pasado, para un mismo número de acciones, que representaban cerca de US$ 80,000 millones en ese momento.
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Esta nueva operación “se inscribe en la prolongación de las iniciativas a largo plazo de Arabia Saudita encaminadas a estimular y diversificar la economía (...) en el marco de la Visión 2030, un amplio programa de reformas llevado a cabo por el príncipe heredero y dirigente de facto del reino, que también encabeza el PIF”, afirmó SPA.
Añadió que “también reforzará la solidez de la posición financiera y la calificación crediticia del PIF”.
Aramco, una empresa antiguamente totalmente estatal, se introdujo con gran éxito en la bolsa de valores de Riad en diciembre de 2019.
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