Alemania quiere traer trabajadores extranjeros lo antes posible para aliviar a los aeropuertos abrumados por la escasez de personal durante la ajetreada temporada de verano, señaló un portavoz del Ministerio del Interior.
Los trabajadores temporales, a los que se les ofrecería alojamiento y un salario estándar, tendrían que cumplir los mismos controles de seguridad y fiabilidad que el resto del personal, por ejemplo los manipuladores de equipaje, lo que en general lleva unas dos semanas, dijo el portavoz en una conferencia de prensa regular del Gobierno en Berlín el lunes.
Los viajeros de toda Europa se enfrentan a colas especialmente largas este verano, ya que la demanda de viajes vuelve a estar en pleno apogeo tras los confinamientos por el COVID-19, y los aeropuertos y las compañías aéreas tienen problemas para mantener suficiente personal para hacer frente a la crisis.
Un portavoz del Ministerio de Trabajo no quiso comentar cuántos trabajadores extranjeros se espera que vengan, pero Bild am Sonntag informó de que el objetivo es traer a Alemania un número de cuatro dígitos de trabajadores cualificados de Turquía para trabajar a partir de julio.
Los trabajadores extranjeros podrían utilizarse para el manejo de equipajes, dijo Andreas Rosskopf, presidente del sindicato de la policía alemana.
No obstante, advirtió que no se debe intentar colocarlos en puestos que requieran más seguridad.
“Estamos hablando de personas que tienen que ser examinadas e informadas intensamente en términos de seguridad. Eso requiere cierto tiempo”, dijo Rosskopf al periódico Rheinische Post.