Desde la víspera (miércoles) los suministros de gas para Alemania procedente de Rusia, a través de Nord Stream, rondan el 20% de la capacidad del gasoducto. Foto: archivo AFP/ Ina FASSBENDER
Desde la víspera (miércoles) los suministros de gas para Alemania procedente de Rusia, a través de Nord Stream, rondan el 20% de la capacidad del gasoducto. Foto: archivo AFP/ Ina FASSBENDER

El gobierno alemán estima que la tasa que se implantará para apoyar al sector del gas acarreará costes adicionales de “unos cientos de euros” en la factura energética de los hogares, aunque advierte de que es prematuro tratar de precisar su alcance final.

El ministro de Economía y Protección del Clima, Robert Habeck, hizo esta estimación provisional en relación a la tasa que se implantará en octubre y que percibirán las empresas del sector, como Uniper, para paliar sus problemas de liquidez en medio de la reducción de los suministros de gas ruso.

La duración aproximada para esa tasa sobre el gas es de un año y medio; es decir, desde el próximo octubre y hasta marzo del 2024, previsiblemente.

“No es un paso deseable, pero es necesario hacerlo”, explicó, para añadir a continuación que ello significará para un hogar con cuatro miembros, con un consumo anual aproximado de 20,000 Kwh, un coste adicional “amargo” de “varios cientos de euros”.

La tasa es necesaria para garantizar el suministro de gas, aseguró Habeck, que recordó el rescate aprobado la semana pasada para Uniper y que éste será extensible al resto de compañías afectadas. Esta tasa oscilará, según los cálculos del Ministerio, entre unos 1.5 y 5 céntimos por Kwh.

La semana pasada, el canciller alemán, Olaf Scholz, adelantó que el incremento del precio del gas iba a generar costes adicionales de entre 200 y 300 euros anuales para un hogar integrado por cuatro miembros.

Desde la víspera (miércoles) los suministros procedentes de Rusia a través de Nord Stream rondan el 20% de la capacidad del gasoducto, aproximadamente la mitad del volumen regular antes de que se produjera su suspensión total, por diez días, a mediados de julio.

Pese a esa reducción y la interrupción temporal, los depósitos de gas se siguen llenando.

Este jueves, su nivel era del 67.15% de su capacidad, según la Agencia Federal de Redes (Bundesnetzagentur), mientras que la semana anterior estaba en el 64.8%.

El objetivo de Habeck es lograr llegar al 75% a principios de setiembre y al 95% en noviembre para garantizar con ello el servicio durante todo el invierno.

Según cifras de su Ministerio, Alemania ha logrado en paralelo reducir a la mitad la dependencia del gas ruso, que en febrero alcanzaban el 55% del total de las importaciones y a finales de junio habían bajado al 26%.