China ha tratado de presentarse a sí misma como más pragmática y menos intervencionista que Occidente, al tiempo que insta a una paz negociada.
China ha tratado de presentarse a sí misma como más pragmática y menos intervencionista que Occidente, al tiempo que insta a una paz negociada.

Cuando los talibanes se apoderaron de Afganistán por primera vez en 1996, China se negó a reconocer su Gobierno y dejó su embajada cerrada durante años. Esta vez, Pekín ha sido de los primeros en acoger a los militantes islamistas del país vecino.

TAGS RELACIONADOS