A medida que los nuevos bikinis, prendas de una pieza y calzoncillos rotan en los guardarropas de las personas, las prendas usadas suelen terminar en los vertederos. “El spandex es un material muy difícil de reciclar”, dice Shannon Bergstrom, gerente de marca de sostenibilidad de Recycle Track Systems. (Foto: Bloomberg)
A medida que los nuevos bikinis, prendas de una pieza y calzoncillos rotan en los guardarropas de las personas, las prendas usadas suelen terminar en los vertederos. “El spandex es un material muy difícil de reciclar”, dice Shannon Bergstrom, gerente de marca de sostenibilidad de Recycle Track Systems. (Foto: Bloomberg)

Durante la primera mitad del año, antes de que surgiera el espectro de la variante delta, los consumidores se sentían liberados. Junto con los boletos de avión y los tacones altos, los trajes de baño se convirtieron en imprescindibles para aquellos compradores deseosos de escapar de la cuarentena.