
En una entrevista de trabajo, cada detalle cuenta. Desde el saludo hasta cómo respondes preguntas difíciles, todo influye en la impresión que dejas. Pero incluso con una buena preparación, es fácil cometer errores que pueden costarte el empleo. Para evitarlo, la experta en etiqueta empresarial Jacqueline Whitmore revela los fallos más comunes. Toma nota y evita estos 7 errores en tu entrevista de trabajo.
No ir preparado a la entrevista
Uno de los errores más comunes (y fáciles de evitar) es llegar a la entrevista sin haber investigado sobre la empresa. Whitmore le dijo a Business Insider que muchos candidatos no aprovechan herramientas como LinkedIn, el sitio web de la compañía o sus redes sociales para conocer mejor a la empresa y a su posible entrevistador.
“No hay excusa para presentarte sin saber nada sobre la empresa”, advierte. Además, recomienda llevar preguntas bien pensadas y adaptadas a la empresa, en lugar de soltar cualquier cosa genérica. La clave está en demostrar interés y preparación.

Descuidar tu apariencia o vestirte demasiado informal
Vestirse de forma demasiado relajada es un error común en las entrevistas. Jacqueline Whitmore explica que, aunque rara vez alguien va “demasiado arreglado”, muchos candidatos no prestan atención a los pequeños detalles, como combinar bien los zapatos con el cinturón o quitar las etiquetas y costuras de un traje nuevo.
“Si un candidato no cuida esos detalles, ¿por qué un empleador confiaría en que será meticuloso en su trabajo?”, señala. Así que mejor revisa tu atuendo antes de salir y asegúrate una imagen profesional y cuidada. Después de todo, en una entrevista cada detalle suma, y tu apariencia también habla de tu nivel de preparación y atención.
Descuidar tu imagen en redes sociales
Antes de una entrevista, tu presencia en línea importa más de lo que crees. Jacqueline Whitmore advierte que lo primero que hará un empleador será buscarte en Google y revisar tus redes sociales.
“Verán qué comes, qué bebes, cómo vistes, con quién sales y qué estilo de vida llevas… y, sí, emitirán juicios”, explica.
Por eso, es clave ajustar tu configuración de privacidad y hacer una limpieza digital. Elimina cualquier publicación que pueda jugar en tu contra y asegúrate de que tu perfil refleje lo mejor de ti.

Dejar la cámara apagada en una entrevista virtual
Si la entrevista es en línea, apagar la cámara es un gran error. Puede ser tentador hacerlo por nervios o incomodidad, pero Whitmore recomienda mantenerla encendida para que el empleador pueda verte y captar tus expresiones faciales.
Además, tu fondo también importa. Un espacio desordenado puede distraer y restar profesionalismo. “Si no tienes otra opción, una pared en blanco es mejor que un fondo caótico”, aconseja Whitmore. Así que asegúrate de que todo luzca ordenado y da la mejor impresión posible.
Llegar tarde a la entrevista
Ser puntual no es opcional. Whitmore lo deja claro: “Si llegas justo a tiempo, ya llegaste tarde”. La clave es llegar con anticipación para evitar imprevistos y demostrar compromiso.
Llegar temprano te da margen para encontrar el lugar, relajarte y hasta hacer una última revisión antes de la entrevista. Además, te permite recuperar la compostura y empezar con confianza.

Olvidar enviar una nota de agradecimiento
Muchas personas pasan por alto este detalle, pero un simple mensaje de agradecimiento puede marcar la diferencia. Whitmore recomienda enviar un correo electrónico y, si es posible, una nota escrita para reforzar tu interés en el puesto.
Lo ideal es hacer el seguimiento dentro de las 24 horas posteriores a la entrevista y personalizar el mensaje. “Dirígete al entrevistador por su nombre, menciona algo específico que disfrutaste y refuerza por qué eres un buen candidato”, aconseja Whitmore.