El método 333 es una excelente manera de optimizar tu tiempo y aumentar tu productividad sin sacrificar tu bienestar. (Pexels)
El método 333 es una excelente manera de optimizar tu tiempo y aumentar tu productividad sin sacrificar tu bienestar. (Pexels)

La productividad es uno de los pilares fundamentales para alcanzar el éxito en cualquier ámbito de la vida laboral. Ya sea que trabajes para una gran empresa o estés desarrollando tu propio negocio, aprender a organizar mejor tu tiempo es clave para lograr tus metas y mantener un equilibrio saludable entre trabajo y vida personal. En este sentido, el método 333, desarrollado por el escritor británico Oliver Burkeman, ha ganado notoriedad por su capacidad para ayudar a las personas a optimizar su día y ser más productivas.

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Este método, detallado en el bestseller Four Thousand Weeks: Time Management for Mortals (Cuatro mil semanas: Gestión del tiempo para mortales), se ha convertido en una herramienta muy útil para quienes buscan organizar su trabajo de manera más eficiente y sin que esto afecte negativamente su descanso o bienestar.

¿En qué consiste el método 333?

El método 333 es una técnica de productividad muy sencilla de implementar, que gira en torno al número tres, haciéndola fácil de recordar y aplicar en tu día a día. Burkeman plantea que, para ser realmente productivos, debemos dividir nuestro tiempo en tres bloques clave: tres horas, tres tareas y tres actividades. Veamos en qué consiste cada uno de estos elementos:

1. Tres horas: el bloque más importante del día

El primer paso para aplicar el método 333 es bloquear tres horas de tu jornada laboral para dedicarte exclusivamente a tu proyecto más importante o exigente. Este es el trabajo que requiere mayor concentración y es el que más impacto tendrá en tus resultados a largo plazo. La idea es que uses estas tres horas durante el momento del día en que estés más alerta y con más energía, evitando distracciones como revisar correos electrónicos, notificaciones del teléfono o redes sociales.

Estas tres horas representan tu tiempo más productivo, por lo que es crucial que las utilices de manera eficiente. Concentrarte en una tarea de gran relevancia te permitirá avanzar de forma significativa y evitarás la procrastinación que suele ocurrir cuando intentas hacer demasiadas cosas a la vez.

Si estás buscando una forma sencilla, pero efectiva de mejorar tu productividad en el trabajo, este método es definitivamente una herramienta que deberías considerar implementar. (Pexels)
Si estás buscando una forma sencilla, pero efectiva de mejorar tu productividad en el trabajo, este método es definitivamente una herramienta que deberías considerar implementar. (Pexels)

2. Tres tareas: actividades importantes, pero menos exigentes

Una vez que hayas completado las tres horas de trabajo intenso, es momento de enfocarte en tres tareas importantes, pero que no demandan tanto esfuerzo ni concentración. Este bloque es igualmente esencial para el éxito de tu jornada, ya que te ayudará a mantener el ritmo de trabajo sin sentir que estás quemando toda tu energía en una sola tarea.

En este punto, puedes dedicar tiempo a actividades como llamadas telefónicas, reuniones o resolver pendientes que, aunque no sean tan exigentes como el proyecto principal, son fundamentales para el avance de tu trabajo. Completar estas tres tareas te brindará una sensación de logro adicional, lo que refuerza tu sensación de productividad.

3. Tres actividades: mantenimiento y organización

El tercer y último bloque del método 333 se refiere a las tres actividades de menor esfuerzo que realizarás cuando ya estés cerca del final de tu jornada laboral, momento en el que tu capacidad de concentración tiende a disminuir. Estas son las tareas de mantenimiento o de organización que te preparan para el día siguiente y te permiten cerrar tu jornada de manera ordenada.

Entre estas actividades pueden incluirse la revisión de correos electrónicos, la planificación de las tareas del próximo día o la revisión de lo que has logrado durante el día. Aunque estas actividades no son las más emocionantes, son esenciales para mantener tu productividad a largo plazo, ya que te ayudan a estar siempre preparado y evitar que el desorden y los pendientes se acumulen.

Al organizar tu jornada en tres bloques enfocados en las tareas más importantes, las tareas relevantes y las de mantenimiento, puedes asegurarte de que cada parte de tu día esté bien aprovechada. (Pexels)
Al organizar tu jornada en tres bloques enfocados en las tareas más importantes, las tareas relevantes y las de mantenimiento, puedes asegurarte de que cada parte de tu día esté bien aprovechada. (Pexels)

¿Por qué funciona el método 333?

El éxito del método 333 radica en su simplicidad y en cómo permite estructurar tu día de manera que aproveches al máximo tus horas más productivas. Al dividir el tiempo en tres bloques bien definidos, puedes enfocar tu energía en lo que realmente importa, evitar el agotamiento y al mismo tiempo mantener un flujo de trabajo constante.

Además, este método te ayuda a reducir el estrés, ya que tendrás un plan claro para cada parte del día. Al saber qué debes hacer y cuándo, evitarás la sensación de agobio que muchas veces aparece cuando tenemos demasiadas tareas pendientes y no sabemos por dónde empezar.

Otro aspecto interesante del método 333 es que te permite terminar tu día con la tranquilidad de que no sólo has trabajado en las tareas más importantes, sino que también te has dado tiempo para resolver pendientes menores y preparar el terreno para el día siguiente.

SOBRE EL AUTOR

Periodista. Estudió Comunicación en la Universidad de Lima. Diez años de experiencia en medios digitales. Actualmente se desempeña como redactor del Núcleo de Audiencias de El Comercio.