Más de 40 millones de personas en EE. UU. dependen de los cupones SNAP (Foto: AFP)
Más de 40 millones de personas en EE. UU. dependen de los cupones SNAP (Foto: AFP)

¿Eres beneficiario del y esperas algún descuento especial en tu supermercado candidato durante el cierre del gobierno? Conoce las nuevas restricciones de la autoridad federal y lo que implica para millones de familias.

El cierre parcial del gobierno federal, que inició el 1 de octubre de 2025, ha dejado en vilo a más de 40 millones de estadounidenses que dependen del SNAP para acceder a alimentos nutritivos. El Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA), que administra el programa, determinó que los supermercados no pueden ofrecer descuentos ni promociones dirigidas exclusivamente a portadores de cupones SNAP-EBT, advirtiendo duras sanciones si incumplen. Esta medida llega mientras el cierre amenaza con convertirse en el más largo de la historia reciente y los recursos para cubrir pagos completos de noviembre son aún insuficientes.

Beneficiarios SNAP recibiendo ayuda trs cierre de gobierno (Foto: AFP)
Beneficiarios SNAP recibiendo ayuda trs cierre de gobierno (Foto: AFP)

¿POR QUÉ EL USDA PROHÍBE DESCUENTOS EN LOS SUPERMERCADOS PARA QUIENES RECIBEN SNAP?

La instrucción del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) a los comercios es clara: Ofrecer descuentos o servicios solo a los clientes que pagan SNAP constituye una violación de los requisitos del Programa SNAP. La entidad fundamenta esta decisión en la Regla de Igualdad de Trato, que exige a los comercios participantes del programa SNAP mantener los mismos precios y condiciones para todos los clientes, sin importar el método de pago ni su situación en el programa. Así lo confirmó David Cutler, vicepresidente de la Asociación Nacional de Comerciantes de Alimentos (NGA, por sus siglas en inglés): “Los supermercados independientes comprenden la importancia del programa SNAP para ayudar a las familias a acceder a alimentos nutritivos y están siguiendo todas las directrices federales para garantizar que todos los clientes reciban el mismo trato”.​

Cada mes, los beneficiarios del programa SNAP deben recibir el depósito en una tarjeta EBT para poder comprar en comercios autorizados, pero esto se ha paralizado (Foto: AFP)
Cada mes, los beneficiarios del programa SNAP deben recibir el depósito en una tarjeta EBT para poder comprar en comercios autorizados, pero esto se ha paralizado (Foto: AFP)

¿CÓMO SABER SI TAMBIÉN TE CORRESPONDE ALGÚN BENEFICIO O COMPENSACIÓN ADICIONAL?

A pesar de las restricciones del USDA, existen beneficiarios de SNAP que podrían calificar para ayudas adicionales gracias a medidas judiciales o fondos de emergencia aprobados de forma excepcional. Para verificar si puedes recibir algún pago, aumento temporal o ayuda alternativa:

  • Consulta regularmente la plataforma oficial del USDA (usda.gov/snap) o la web oficial de tu estado, ya que los gobiernos estatales administran la asignación y podrían implementar pagos parciales, fondos de contingencia o programas de asistencia alimentaria local.
  • Revisa los comunicados de organizaciones comunitarias, bancos de alimentos y ONG, donde se anuncian muchas veces apoyos adicionales o raciones gratuitas en periodos de crisis como el cierre federal.
  • Comprueba que tu cuenta EBT esté actualizada y activa para recibir cualquier dispersión de emergencia, como la que dos jueces federales ordenaron para noviembre mediante un fondo de contingencia de US$4,650 millones, aunque se advierte que no cubre la totalidad de los beneficios regulares.
  • Si recibes un aviso oficial, correo escrito o notificación en tu historial de SNAP, sigue las instrucciones para renovar tu solicitud o acceder a cualquier ayuda temporal.​

LAS CONSECUENCIAS PARA LOS SUPERMERCADOS Y EL IMPACTO EN EL BENEFICIARIO SNAP

El incumplimiento por parte de supermercados o minoristas de las condiciones establecidas por el USDA puede derivar en la suspensión inmediata de la autorización para aceptar SNAP, multas severas e incluso litigios federales. Para los consumidores, la imposibilidad de aprovechar beneficios o descuentos adicionales incrementa la presión económica, especialmente durante el cierre gubernamental más prolongado y en un contexto inflacionario.